Indonesia; nacimiento de un gran viaje con calidad pero... ¿cuanto cuesta?

Por Nacho22 @nuestromundovia

No estaba en nuestros planes inmediatos planificar un viaje a Indonesia, y aunque es bien cierto que nos estaba empezando a llamar desde hacía un tiempo la gran cantidad de atractivos de este inmenso país, como ya he dicho no pensábamos que ésto se fuera a producir pronto. Pero todo cambió un día del mes de mayo cuando una oferta irresistible de vuelos a Kuala Lumpur desde Madrid por parte de British Airways -poco más de 330 euros por persona- hizo que adquiriéramos los billetes sin pensar. A partir de ahí se puso en marcha la planificación del viaje que requeriría nuevamente de todo un despliegue logístico, debido sobre todo a tener que desplazarnos entre islas en este enorme archipiélago que compone Indonesia. Al final, y después de varias modificaciones, llegamos a un recorrido que pensábamos que era el más apropiado para las casi tres semanas que pasamos en aquellas tierras. 

Y tras una minuciosa lectura de blogs y de la guía que compramos de Bali y Lombok, cerramos un recorrido por Indonesia de algo menos de tres semanas para conocer algunos de los lugares más emblemáticos de este país tan poco visitado del sudeste asiático. Este país requiere de varios viajes para conocer todos los atractivos que puede ofrecer. Aquí voy a hacer un resumen del periplo que significó llegar a Indonesia, los lugares en los que nos alojamos, algunos de los medios de transporte necesarios para llegar a lugares distantes y los precios que pagamos por todo ello, sin meterme en gastos personales, comidas y demás. Comenzamos la aventura con el primero de los vuelos de Santander a Madrid en un Bombardier CRJ 300 de Air Nostrum. Ya en el Aeropuerto de Barajas embarcamos en un Airbus A340 de Iberia con el que volamos hasta Londres, para una vez allí embarcarnos de nuevo en un Boeing 777-300ER de British Airways con el que volamos hasta Kuala Lumpur. Y en la capital de Malasia tocó esperar tres horas y media para poder continuar hacia nuestro destino final en el que sería el cuarto vuelo. A esas alturas el cansancio comenzaba a apoderarse de nosotros pero la ilusión seguía intacta.


Pero todavía no habíamos llegado aún a nuestro destino. El vuelo de British llegó puntal ala terminal 1 del aeropuerto de Kuala Lumpur, pero debíamos desplazarnos hasta KLIA2, es decir, la terminal que utiliza casi en exclusiva la poderosa aerolínea de bajo coste AirAsia.  Así que, tras la espera y otro vuelo de cuatro horas, por fin aterrizábamos en el aeropuerto de Denpasar en Bali. Allí pasamos la aduana y decidimos pagar voluntariamente el visado de entrada -35 dólares por cabeza- para sorpresa del funcionario. Ésto último requiere una aclaración. Si bien es cierto que para los españoles desde junio del 2015 no es necesario pagar el visado, ésto es válido si entras y sales por los aeropuertos de Yakarta, Denpasar, Medan, Batam y Juanda en Surabaya. Pero nosotros íbamos a salir de Indonesia por el Aeropuerto de Yogyakarta con lo que en caso de no tener el visado pagado no nos permitirían abandonar el país por ese aeropuerto. Y esa es la explicación que hay que tener en cuenta. Pues bien, desde el aeropuerto de Denpasar nos trasladamos en taxi hasta nuestro hotel en Legian, junto a la marchosa y ruidosa Kuta. El Hotel Swiss Belinn Legian cumplió las expectativas, con un fabuloso desayuno bufé, una preciosa piscina en la azotea con vistas y bar "chill out", y a cinco minutos de la playa de Kuta pero sin ruidosos clubes nocturnos y discotecas alrededor.

La siguiente etapa de nuestro viaje nos llevaba hasta la poco turística isla de Lombok. Para ello existen diferentes maneras de hacerlo que pasan por ir en avión -caro e innecesario- ,en un lento ferry local o hacerlo en lanchas rápidas -la opción más versátil y rápida-. Hay varias compañías con distintos precios también, pero algunas te iban a buscar al hotel y otras no, de ahí las diferencias. Además las opiniones de internet de muchos viajeros nos hizo decantarnos por los BlueWater Express, que contaban con lanchas de 17 metros de eslora y cinco fuerabordas de 250 caballos de potencia y al parecer bastante puntuales. En Indonesia no es broma el tema de las travesías en barcos. Todos los años hay tragedias marítimas con muchas víctimas así que merece la pena sopesar bien cuál elegimos. Y así fue, puntuales al pasar a recogernos por el hotel y puntuales en la salida, en una navegación marítima de unas dos horas y media- el ferry tarda mas de doce horas-. Tuve la oportunidad de subir al techo de la embarcación junto a una pareja argentina y un grupo de australianos y del que ya no pudimos bajar al empeorar las condiciones de la mar -era peligroso descender la escalera vertical con tantos rociones de agua-, así que acabamos empapados cuando llegamos a Lombok


La oferta hotelera en Lombok es muy escasa. Un par de caros resorts, unos cuantos alojamientos baratos y quizás no más de dos hoteles medios, además de una veintena de restaurantes concentrados sobre todo en Senggigi. Nos decantamos por el hotel Sunset Lavinia en Senggigi, regentado por Maya y su marido, situado en un alto con preciosas vistas panorámicas del majestuoso volcán de Lombok, de la selva circundante y de las playas y el mar justo al fondo, y por donde se ocultaba el sol todas las tardes. Un lugar totalmente recomendable y con una maravillosa piscina. 




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Y el siguiente destino nos deparaba el paraíso submarino. No muy lejos de Lombok, cerca de sus costas, tres islitas emergen de las turquesas aguas del Mar de Bali. Las Islas Gili, paraíso mochilero en los ochenta, nos ofrecieron unos días inolvidables de sol, snórkel, navegación y marcha. Hasta ellas llegamos con una de las lanchas rápidas que cubren la ruta desde Senggigi, más caro pero sobre todo mucho más rápido que las lentas barcazas locales. Aquí nos decantamos por unas cabañas regentadas por Iván, un expatriado natural de Módena que dirige el alojamiento Resota Twins. Pasamos una estancia estupenda y con ganas nos hubiéramos quedado un par de días más.

Esta estancia en las cabañas fue una experiencia muy buena. Su cuarto de baño era enorme y la ducha estaba revestida de piedra en forma cantos rodados, curioso y muy práctico. Contaba también con aire acondicionado -esto muy importante- y un porche donde nos servían el desayuno todas las mañanas. 



Regresamos otra vez a la isla de Bali para explorar esta vez el centro y norte de la isla. La lancha rápida nos trasladó desde Gili Trawagan hasta el puerto de Pandangbai, hora y media de dura travesía con olas que se estrellaban contra el casco y estructura de la lancha rápida. Una vez en puerto el mismo servicio de Bluewater Express nos trasladó hasta nuestro alojamiento en Ubud, la capital cultural de Bali. Durante seis días este lugar nos serviría de base y para ello reservamos un alojamiento especial con una familia de Bali  que al igual que otras muchas aprovechan el tirón turístico para sacar unos ingresos extras. El Teja Home Stay tenía las mejores críticas de la zona y desde luego que no nos decepcionó en absoluto. Ya quisieran muchos hoteles europeos de cuatro estrellas - e incluso algunos de cinco- ofertar una habitación como ésta. Por las mañanas nos preparaba el desayuno en el patio común de la familia, e incluso alguna mañana la abuela de la familia elaboró algún plato típico especialmente para nosotros. 



El Penúltimo salto entre islas llegó con el vuelo de Garuda Indonesia de Bali a Yogyakarta, en la isla de Java. y que sería la última fase del viaje en Indonesia. Me sorprendió muy agradablemente el Boeing 737 de la compañía de bandera de indonesia : pantallas individuales, asientos tapizados en la típica tela batik, asistentes de cabina súper amables, bebida y pequeño almuerzo incluido en el precio y todo en un vuelo de una hora de duración. En fin, que ya podrían aprender las compañías europeas.


Y el último de nuestros alojamientos en Indonesia, el hotel Aloha en Yogyakarta, regentado en esta ocasión por un expatriado francés de origen español y con el que disfrutamos de numerosas charlas durante el desayuno. Un hotelito limpio, con personal muy amable y pegado a una de las calles animadas sel sur de Yogyakarta, con restaurantes y tiendas. Además nos facilitaron desde el coche de alquiler con conductor para poder visitar los templos de Borobudur y Prambanan hasta el alquiler de la moto, y todo por un precio increíble. 



El punto final de este inolvidable viaje por Indonesia lo puso el último vuelo con Air Asia de Yogyakarta a Kuala Lumpur donde pasaría un día y medio antes de embarcar en otro avión rumbo a Londres. A pesar de que ya conocíamos de otra ocasión Kuala Lumpur siempre apetece regresar a la capital de Malasia y pasar unos buenos momentos paseando por su centro financiero y sus barrios hindús y chino. Y precisamente en este último, en el barrio chino, nos alojamos en esta estancia final del viaje. 

El hotel Lantern fue de lejos el menos afortunado de todos los alojamientos, aunque también es verdad que estaba limpio, con aire acondicionado, muy barato y un desayuno con un capuccino excepcional. Pero sus paredes acabadas en bloques de cemento pintado y el exiguo tamaño de la habitación más propio del Japón lo colocó en último lugar. eso si, en mitad del barrio chino de Kuala Lumpur.


Y tras una pequeña disección de la logística de este viaje por Indonesia, las siguientes entradas del blog las dedicaré a cada uno de los destinos en los que recalamos en este tan diferente y apasionante viaje, lo que vimos y cómo lo hicimos para verlo, y lo que nos gustó mucho y lo que nos gustó mucho más aún. Por cierto, todos los hoteles y alojamientos cumplieron una serie de requisitos a saber: críticas excelentes por los usuarios, con desayuno incluido, económicos, habitaciones con baño amplias y con aire acondicionado y buena ubicación. A los gastos abajo detallados habría que sumar las comidas y cenas, las compras, gastos de lavandería, bebidas, alquiler tumbonas, pago de excursiones de snórkel y diferentes entradas a templos y lugares de interés.
El resumen final de gastos para dos personas quedaría de esta forma:
                    - Vuelo de Air Nostrum  Santander-Madrid .............................. 97  euros
                    - Vuelo de British Airways  Madrid- Kuala Lumpur..................674  euros
                    - Vuelo de Air Asia Kuala Lumpur-Bali.......................................94  euros
                    - Vuelo de Garuda Indonesia Bali- Yogyakarta...........................91  euros
                    - Vuelo  de Air Asia Yogyakarta-Kuala Lumpur........................110  euros
                    - Lancha Bali-Lombok y Gili-Bali..............................................188  euros
                    - Lancha Senggigi-Gili.................................................................27  euros
                    - Alojamiento Legian (Kuta)........................................................130  euros
                    - Alojamiento Lombok.................................................................128  euros
                    - Alojamiento Gili.........................................................................111  euros
                    - Alojamiento Ubub.....................................................................155  euros
                    - Alojamiento Yogyakarta.............................................................78  euros
                    - Alojamiento Kuala Lumpur........................................................22  euros
                    - Taxis y coches con conductor...................................................162  euros    
                    - Alquileres de motos y gasolina...................................................28  euros
                                                                       
                                                                Total dos personas.....................2.095  euros
                      -Total gasto por persona 18 días   :   1.047,5 euros
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