Inés y la alegría

Por Epifania
"La Historia inmortal hace cosas raras cuando se cruza con el amor de dos cuerpos mortales", esta conclusión a la que llega Almudena Grandes en su novela "Inés y la alegría" es la clave para entender porque sucedieron los acontecimientos que posteriormente narra la autora, pero también es el nexo de unión entre la Historia que los libros de texto nos cuentan y los pequeños relatos de la gente que vivió en aquel tiempo, los verdaderos protagonistas.
Inés y la alegría es una novela basada en un hecho histórico poco conocido como fue la invasión del Valle de Arán en 1944. En plena  efervescencia de franquismo un ejército entero de soldados republicanos, procedentes del sur de Francia, se adentran en el Valle de Arán con un único pensamiento: derrotar a Franco y volver a instalar la República.Sin embargo, la realidad con la que se encuentran es muy diferente, los españoles ya no son los que eran cuando se exiliaron. España entera estaba muerta de miedo, más preocupada en sobrevivir día a día y de llorar a los muertos que la Guerra Civil  dejó en el camino.
La historia que nos presenta Almudena Grandes es la de los perdedores. La de aquellos que se tuvieron que ir, luchar contra los nazis en una guerra que no era la suya, que anhelaban volver para cambiar las cosas y a los que su propio partido les dio las espalda jugándose la vida por "castillos en el aire".
Aunque parezca mentira, no es otra cosa que el "amor de dos cuerpos mortales" y la traición las que hicieron posible la invasión de Valle de Arán. La dirección del Partido Comunista en Francia la llevaba Carmen de Pedro, una joven ilusa, manejable y sin aspiraciones que se enamoró locamente de Jesús Monzón, un oportunista con las ideas claras que sólo quería quitarle el poder para conseguir sus ambiciones. Y lo logró, Jesús dio su golpe, pero le dieron la espalda, simplemente porque no era el momento. El Partido Comunista se desentendió de la invasión y la pararon, puesto que la coyuntura internacional no era la propicia, y Franco por su parte se puso nervioso y lo ocultó a la sociedad a toda costa. Por ello,este episodio de la historia de España apenas se conoce y la autora hace una reconstrucción personal de los hechos.
En este contexto, como no podría ser de otra manera en una novela, la ficción se mezcla con la realidad y Almudena Grandes nos presenta la historia de Inés, una niña rica que se ve por azar sola en plena guerra y que se encuentra a si misma dentro del bando republicano  y Galán un minero asturiano que luchó en el bando perdedor en la guerra.
 En cuanto se conoce al personaje de Inés la novela engancha. La protagonista encarna la imagen de la libertad, una heroína que galopa a caballo para apoyar la invasión del Valle de Arán con toda su voluntad y cinco kilos de rosquillas. Inés es torturada, encarcelada y encerrada después por su hermano falangista pero su ilusión por luchar por un futuro mejor y ser libre es infinita.
La figura de Galán encarna la lucha por un ideal. Con este personaje la autora da a conocer como fue la vida de un comunista en el exilio sus sentimientos, sus añoranzas,y nos presenta el mundo del espionaje que se llevo a cabo en la etapa franquista por parte del Partido Comunista.
Con sus luces y sus sombras, en esta novela se refleja muy bien la lucha de los comunistas durante décadas, la vida en la clandestinidad que llevaban, pero sobre todo nos da una lección: la ilusión y la esperanza mueve montañas, y la unión siempre hace la fuerza.

Guerrilleros en el Valle de Arán