Un día en el coche con la radio puesta:
-Mamá, qué dicen los señores de la radio? Tonterías?
-Pues mira, ya que lo preguntas…sí,a veces dicen tonterías. No todo lo que dicen en la tele y en la radio es verdad. Hay que aprender a distinguir entre las cosas serias, las bromas y las tonterías.
Dos días después:
-Tómate el desayuno, vamos…
-Bueno mamá, no te preocupes, he visto en la tele una medicina que sirve para que los niños estén bien alimentados.
Toma ya! Y qué hacemos ahora? Prohibimos la tele? Porque claro, lo de volver a explicarle que todo lo de la tele no es cierto, cala lo justito a sus cuatro años. También me ha dicho que hay un cacao que se bebe más rápido ( el de las pepitas en el fondo, se lo ha tomado al pie de la letra). Pensará que se bebe solo. Te pones la taza delante, y ala, se bebe sola y a toda velocidad.
Todo esto me hace pensar en lo maleable que es la mente de los niños, lo influenciables que puede llegar a ser.
Otro ejemplo: en casa no somos futboleros; Chiquinini no ha visto un partido de fútbol ( ni medio) en su vida. Pero él es del Barça, porque su padre dice que es del Barça. Pues ahí está, llevándose disgustos porque sus amigos, que son del Madrid, se meten con "su" equipo. El colmo del absurdo! Y no, no se cambia debando. Ha dicho que es del Barça, como su padre, y se acabó. Pero si ni siquiera le gustajugar al fútbol en el cole!
Así que me da por pensar en la responsabilidad tan grande que tenemos por delante, y en que en ningún sitio dan el carné de padre/madre con un APTO o NO APTO. Pero obviamente todo lo que les enseñemos, y supongo que especialmente lo que les enseñamos de forma inconsciente con nuestro comportamientodiario, va calando, calando y va dando forma a esa personita…Madre mía!Emocionante e impresionante a partes iguales.