El informe anual de la entidad supervisora publicado hoy señala que la reforma laboral ha facilitado un ajuste más equilibrado entre salarios y empleo ante un contexto recesivo, pero ve "muy preocupante" el riesgo de que se hagan crónicos casos de desempleo de larga duración.
Explica que en 2012 se elevó la duración media de paro hasta más de diez meses, frente a los cinco meses de 2007, en tanto que la incidencia del desempleo de larga duración se situó en el 52,4 % del total de desempleados, siendo "especialmente" elevada en los colectivos de mayor edad y de menor nivel de formación.
El organismo supervisor asegura que los "logros" de la reforma laboral en materia de flexibilidad interna y moderación salarial son "esperanzadores", pero los resultados en impulso a la contratación no son todavía suficientes, aunque confía en que lo sean en el futuro.
"La gravedad de la situación por la que atraviesa el mercado laboral aconseja mantener y profundizar el impulso reformador mediante la adopción de medidas adicionales que promuevan la creación de empleo a corto plazo y faciliten la flexibilidad de los salarios", afirma la entidad.
En este sentido, aboga por la continuidad de la moderación salarial en las renegociaciones de los convenios colectivos de los próximos meses porque -dice- "resulta vital para acelerar la recuperación de las pérdidas de competitividad de la economía y sentar las bases de un mayor crecimiento".
También aconseja "explorar" fórmulas adicionales como la desviación temporal respecto a las condiciones establecidas en la negociación colectiva, así como mecanismos que eviten que el salario mínimo actúe "como una restricción" en determinados grupos de trabajadores con dificultades para la empleabilidad.
Asimismo, sugiere dar "pasos adicionales" para asegurar que la reducción del alcance de las cláusulas de revisión salarial no se revierta en fases de crecimiento económico.
En este sentido se felicita por el menor grado de vinculación de los salarios a la inflación, pero lamenta que no se haya producido un cambio significativo en la estructura de la negociación colectiva y que los convenios de empresa sigan teniendo un peso similar al que tenían antes de la reforma laboral.
Según el Banco de España, en términos de empleo, "la pauta de destrucción de puestos de trabajo ha sido muy similar a la de antes de la reforma, tanto en su magnitud como en la concentración del descenso de la ocupación de los asalariados con contratos temporales".
Constata que por el lado de la contratación "no se observan hasta ahora modificaciones relevantes de las pautas vigentes previamente".
Señala que se requiere "más tiempo para evaluar con precisión" el impacto de la última reforma laboral y advierte de que los indicadores coyunturales disponibles a comienzos de 2013 "no auguran una creación neta de empleo a corto plazo", pese a que se suavizará "ligeramente" la caída de la ocupación.