Varios integrantes de diferentes ONG e inmigrantes de Barcelona realizan desde ayer una huelga de hambre de 50 horas, en demanda de los derechos que tienen los extranjeros/as a la sanidad, la educación y a denunciar que se les relacione con la inseguridad ciudadana.
Cerca de un centenar de personas participan en esta huelga de hambre y duermen en las iglesias de Sant Medir y Sant Antoni Claver, entre otros lugares de esa zona, informó a la agencia EFE Jorge Sánchez, de portavoz de la plataforma Papeles para Todos.
Los reclamantes permanecerán en vigilia hasta el próximo lunes día primero, aunque no descartan salir a las calles durante el día como parte de la manifestación.
Esta huelga de hambre se realiza tras los enfrentamientos ocurridos esta semana en Salt, Girona, entre vecinos e inmigrantes, pero esta no es la única causa, ya que también citan los problemas surgidos en Barcelona cuando el ayuntamiento de VIC no quería empadronar a los sin papeles, a quiénes piensan les disminuirán el derecho a la salud y la educación.
Las acciones que realizan estas asociaciones buscan evitar que no se prive a nadie de sus derechos, que pare el debate que relaciona a la inmigración con la inseguridad ciudadana y para solidarizarse al mismo tiempo con los trabajadores extranjeros/as de Italia, Francia y Grecia que este lunes harán una huelga en las calles, para hacer ver lo importante que son ellos y ellas para la economía de los citados países.
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