Vale que el negocio en que se encuadra ha reducido mucho su visibilidad, vale que hizo un contrasplit en 2011 de 100x1, vale que deberíamos esperar a que supere sus máximos previos en 2,05 €... valen todos los argumentos a favor y en contra del título, pero en cuanto haya un cambio de actitud o desaparezca el papel, el de las inmobiliarias puede ser el próximo sector en ebullición y que puede dar elevadísimas ganancias en el largo plazo.
Eso si hay que tener estomago para aguantar los bandazos que suele tener en cada jornada y mejor entrar cuando veamos que sube, no cuando recorta, que nunca sabremos cuan barata, o cuan abultado está siendo el recorte de la jornada.
Reitero el riesgo que tiene entrar en este título pero puede merecer mucho la pena, muchísimo, hay que recordar que ha habido meses en los que se revalorizaba un 30, un 50, un 70 o incluso un 100% justo por efecto del papel, del bajo free float de la compañía, de la fuerte especulación y concentración de los seguidores de los "chicharros".