El teniente Jonathan Stride está sufriendo un desagradable episodio de déjà vu. Por segunda vez en un año, una guapa adolescente ha desaparecido de las calles de Duluth, una pequeña y apacible ciudad a orillas de un lago. Las víctimas no pueden ser más diferentes; primero fue la dulce Kerry McGrath y ahora se trata de Rachel Deese, una chica problemática y seductora. Los medios presionan a Stride para que capture a lo que consideran un asesino en serie, pero él, atormentado por la pérdida de su mujer y por su incapacidad para resolver el caso de Kerry, no cree que la solución sea tan sencilla. De hecho, según va desvelando los entresijos del caso de Rachel, advierte que se trata de algo mucho más complejo y maléfico.