Hace no mucho,un año escaso BL rescato este cómic y lo volvió a sacar en formato ómnibus con paginas y contenidos extras,siendo ahora un solo volumen de 160 paginas en total,por un precio de 25 euros.Aun esta a la venta.
En el primer volumen un inquisidor llamado Defay,acompañado por su acólito el interrogador Gravier,viajan al mundo imperial de Nicodemus para investigar una posible infección del Caos en este mundo,empezando por un importante familia del planeta.Pero las cosas se tuercen.En el segundo Gravier va en pos de su antiguo mentor siguiendo las ordenes de otro Inquisidor llamado Reiker que esta convencido de que es un traidor y un mutante peligroso.Gravier se va a ver metido en un fuego cruzado muy peligroso,porque mas de uno esta jugando a un peligroso doble juego.
Sin embargo,Inquisitor Ascendant tiene algo que a mi personalmente me cansa mucho cuando afronta obras centradas en la Inquisición y es que es todo el rato la misma historia o al menos el mismo armazón sobre el que se montan las historias que hablan de los Inquisidores:Inquisidor tope de leal al Imperio y que ha luchado mucho por el haciendo un montón de cosas buenas..ay! se corrompe por culpa del Caos(Generalmente...) por lo que hay que buscarlo y matarlo sea como sea,a veces siendo el ejecutor del traidor un tipo cuanto poco cuestionable,como Reiker.Y la verdad es que la lista de inquisidores corrompidos y mas tarde "liberados" por sus ex-compañeros,algunos de los cuales a su vez se corrompen o simplemente deben enfrentarse al imperio que antaño defendieron es...muy larga.Es increiblemente facil ver como se corrompen,ya que se pasan al "lado oscuro" mas en proporción que marines espaciales o miembros de la G.I por ejemplo.Y si encima le sumamos que es obra de Dan Abnett ,el que ha escrito sobre inquisidores como Quixios,Einsenhorn o Ravenor, y concluimos que sus historias suelen tener patrones comunes,digamos que cuando uno pilla esta obra de nuevas,si ha pasado por otras sobre la inquisición sobre todo,puede ver que todo ese buen trabajo pierde su lustre.
Y es una pena,la verdad.