Insensibles: cine fantástico demasiado real

Publicado el 14 junio 2013 por Maresssss @cineyear
in opinamos / by Miguel L. B. / on June 14, 2013 at 10:50 am /

De la mano del festival de cine fantástico Nocturna asistimos al visionado ‘Insensibles’,  ópera prima de Juan Carlos Medina, trabajo que intentaba llevar a cabo desde 2005 y que gracias a una coproducción con Francia al fin consigue ver la luz. Una luz que los personajes de su historia no consiguen ver, ya sea literalmente o de forma metafórica.

El punto de partida es realmente atractivo: Poco antes del estadillo de la Guerra Civil en España se descubre a un grupo de niños en un pueblo que son insensibles al dolor, y por esta causa son cruelmente encerrados, ya que no al no saber que es el dolor no son conscientes del que pueden causar a los demás. Uno es apasionado de las historias con niños, así que no fue muy difícil conquistarme durante los primeros minutos de cinta. Desde aquí la cosa solamente podía ir a peor, y es justo lo que pasa. Se presenta otra trama paralela en el presente, en la que David (Àlex Brendemühl), un importante neurocirujano, sufre un accidente y a raiz de las pruebas que le realizan detectan un cancer que únicamente puede ser tratado con un transplante de medula por parte de sus padres.

Este viaje entre tramas y su múltiple (y buscada) convivencia de géneros hacen que por momentos la película falle en ritmo y narratividad. Se pasa de un inicio fantástico a un cine político que pretende desenterrar la memoria histórica llegando a un drama social como es el de los casos bebés robados. Cine fantástico que pretende ser demasiado real. El cine ya ha querido dejar bien claro quienes son los buenos y malos de una determinada época de la hsitoria de nuestro país y a veces simplemente el espectador quiere ver una película fantástica sin más pretensiones. Y eso que las intenciones son muy buenas, con ese conflicto entre la insensibilidad física de los protagonistas y la insensibilidad moral del régimen. Pero lo dicho, a veces quien mucho abarca poco aprieta.

La película parece querer jugar en la liga del nuevo cine de terror y fantástico abierta hace años por directores como Paco Plaza o Jaume Balagueró, y en determinados aspectos lo consigue. La factura es impecable, con una escenografía y fotografía muy superior a lo que está el público acostumbrado a ver. Un maquillaje como es en el caso del personaje de Berkano que consigue dar bastante miedito (aunque Berkano no es un monstruo comparable en lo terrorífico a la niña de Medeiros de’ REC’). Además las comparaciones son odiosas teniendo otro ejemplo de fantasía e historia del franquismo como es ‘El labertinto del fauno’ de Guillermo del Toro.

No imagine que la maldad pudiera ser tan bella” dijo el acto Juan Diego (padre de David en el film) durante la rueda de prensa posterior, y esa frase se me quedó grabada . Y es así, la intención fin del director, aunque peque de pretenciosidad, es realmente honesta , mostrar que a veces los monstruos son las personas de apariencia normal y que dentro de esa gente que apartamos se esconde una belleza que no llegamos a entender.