Los hermanos Coen construyen una película que vuelve a generar una especie de efecto tardío en el espectador. La sensación al toparse con los créditos va mutando a medida que los minutos corren y nuestra mente empieza a hilvanar ideas y a transitar por diversos pasajes de la historia hasta determinar su veredicto final.Oscar Isaac sorprende gratamente y responde de gran forma encarnando, en su protagónico, a Llewyn Davis, un cantante de folk que intenta ganarse su espacio en el mundo de la música. Un bohemio neto que no tiene hogar y deambula pasando noches en donde amigos le brinden alojamiento esporádico. Nuestro antihéroe viaja de un lado hacia otro, buscando consolidación en su rubro a partir de que algún sujeto importante de la industria le conceda la oportunidad.
LO MEJOR:la interpretación de Oscar Isaac. Los momentos musicales, tan armónicos como personales, cercanos al espectador. Detalles técnicos y simbolismos.LO PEOR: de tramos lentos, sobre todo al principio.
PUNTAJE:8,1