Un 20 de septiembre de 1993 en la localidad de Gladbeck, nacía un niño con muchas aptitudes para el fútbol. A 15 kilometros de Gelsenkirchen, Julian Draxler dio sus primeras patadas al balón en un equipo de su localidad, el BV Rentford. Con ocho años, ojeadores del equipo minero, asombrados por su calidad decidieron llevarlo al Schalke, evitando así que otros clubes se adelantaran. Destacado en todas las categorías inferiores por las que pasó, dejaba huella allí dónde jugaba, por ello, fue un fijo con las inferiores germanas. Su rendimiento no pasó desapercibido para el cuerpo técnico del primer plantel y, en 2011, Draxler tenía los primeros minutos de la mano de Felix Magath, convirtiéndose en el jugador más joven en debutar en el equipo del Veltins-Arena.
Convencidos del potencial del joven, tres días después de su debut la secretaría técnica de los ‘Royal Blues’ consiguió renovarle, aunque no lograron que se centrara en el fútbol por completo. Y es que Draxler es de ese ligero porcentaje de jugadores que compaginan el sueño de ser futbolista con los estudios, se mantuvo firme al querer finalizar los mismo a pesar de las recomendaciones de no hacerlo, el propio técnico alemán reconoció algo -a priori- inentendible: “Julian era un buen estudiante y seguro que habría cerrado sus estudios con muy buenas notas, pero yo le he aconsejado convertirse en profesional y estoy seguro de que he acertado. Julian tiene vocación de futbolista y el futuro es suyo. Tiene una gran carrera por delante en el Schalke”.
La temporada 2011/12 fue la de su consagración. Tras la salida de Iván Rakitic del rumbo a Sevilla, Julian se abrió hueco en el once disputando más de 40 partidos entre Bundesliga, Copa y Europa League. Su gran temporada, marcada por el cambio de entrenador, le valió para hacerse un hueco en la pre-lista de Joachim Löw para ir a la Eurocopa, sin ni siquiera haber debutado en la absoluta. Sin embargo, y como todo hacía indicar, el seleccionador alemán le dejó fuera de la cita.
"Draxler es un jugador con un enorme potencial. Es muy inteligente en el campo, es joven y tiene compromisos con los estudios. Esto sin duda le ayudará a madurar" (Joachim Löw)
La temporada siguiente mantuvo su rendimiento, rozó la cuarentena de partidos firmando actuaciones de súper crack. Fue el año en la que contó habitualmente para el seleccionador alemán, disputando partidos amistosos y de clasificación. Redondeó su temporada alzándose con la Copa de Alemania al imponerse, por cinco tantos a cero, con un gol suyo, al modesto Duisburg, que se encontraba en la 2. Bundesliga en aquel entonces.
Durante el presente curso, Draxler no ha podido disfrutar del fútbol como venía acostumbrado. Una lesión en el tendón de Aquiles que le ha mantenido fuera de los terrenos de juego durante dos meses, ha impedido al espectador disfrutar de él. Sin su estrella, el Schalke se ha visto mermado en la zona ofensiva y se ha aferrado a Goretzka, Farfán y Kevin Prince Boateng, aún así, pelea en la zona noble de la tabla esperando acabar en Champions. Sin embargo, cuando ha jugado se le ha visto muy cómodo en la izquierda en el 4-2-3-1, que bien parece un 4-1-4-1 cuando Prince Boateng se suma al ataque.
Físicamente se trata de un jugador muy rápido gracias a su potente zancada, a pesar de su estatura (185cm), lo que le hace ser peligroso en el juego aéreo. Se entrega al equipo y no es raro verle ayudar en tareas defensivas, sin embargo su poca masa muscular le hace débil frente al oponente. Habituado a partir desde la banda izquierda, también solemos verle en la mediapunta, dónde suele acabar la jugada. Su visión de juego superlativa al resto, facilita a su equipo la tarea en ataque, gracias a los continuos envíos del jugador alemán, que, cuando tiene la oportunidad, también se anima a tirar a puerta. Su disparo desde media-larga distancia es sensacional, desde dónde ha marcado auténticos golazos, además de su gran llegada desde segunda línea. Domina ambas piernas con soltura siendo diestro y tiene la habilidad de dar el último pase a sus compañeros. Partiendo desde la banda tira diagonales hacia el centro para buscar una óptima posición de disparo.
Cuando el Schalke no tiene la pelota tiende a desaparecer, es por eso que baja continuamente a recibir al mediocampo para ayudar a construir la jugada desde el principio. Su entrenador, Jens Keller, debe corregirle ciertos aspectos de su juego que, a sus 20 años, es normal que no tenga adquiridos.
Su presencia en las agendas de muchos grandes de Europa es habitual en las últimas temporadas, sonando para clubes de la Premier como el Arsenal, con insistencia, ó el Manchester United, otros como el Real Madrid y el F.C Barcelona ya han preguntado por él, en el Calcio la Juventus, ó de la propia Bundesliga el Borussia Dortmund.
"Sigo abierto a escuchar propuestas para cambiarme a un club más grande"
Finalizado el mercado de invierno, Horst Heldt (director deportivo del equipo minero), confirmó que hubo una oferta importante, que se barajó su venta pero que finalmente fue rechazada. Se dijo que fue el Arsenal quien realizó dicha proposición.
Se trata, por tanto, de un jugador con la madurez necesaria para dar el salto a un grande, tal vez a una liga más importante y quién sabe si poder optar a cotas más altas que la de "un simple cuarto puesto" con acceso a Europa. Este verano, si la cosa no se tuerce, veremos a Draxler acudir al Mundial de Brasil y, una vez acabada la cita, comenzará el baile de rumores. ¿En que equipo veis a Julian? No me quiero pronunciar, pero lo que si tengo claro es que a Draxler se le queda pequeño el Schalke.
Por Jaime Ojeda, @JaiimeOjeda en Twitter.