Intención paradójica. Lo contrario a lo deseado

Esta técnica resulta muy curiosa, pero a la vez muy eficaz. Es muy utilizada para diversos trastornos además del insomnio, tales como el tartamudeo, comerse las uñas, trastornos de conducta, etc.

Aplicada a los problemas para conciliar el sueño, consistiría en lo siguiente: en lugar de esforzarnos y luchar por conseguir quedarnos dormidos, trataremos de lograr justo lo contrario, es decir, mantenernos despiertos hasta una hora determinada. Así, conseguimos eliminar la ansiedad anticipatoria que nos supone el pensar que las horas pasan y no acabamos de quedarnos dormidos.

Si, por ejemplo, calculamos que solemos quedarnos dormidos sobre las 3 de la madrugada, con esta técnica nos diríamos a nosotros mismos que "no podemos dormirnos hasta las 4", intentando mantenernos despiertos. Así lograremos ganar en tranquilidad y conseguiremos relajarnos, pues estaremos eliminando la presión.

Al fin y al cabo, quedarnos dormidos es como tratar de atrapar a una paloma, si la buscamos y vamos incesantemente a por ella probablemente saldrá volando y se nos escapará, mientras que si esperamos pacientes y tranquilos, la paloma terminará por venir a comer de nuestra mano.