El suceso ocurrió la tarde del martes, cuando el conductor de la pipa estaba abasteciendo un aljibe residencial. Un vehículo sedán blanco pasó sobre la manguera del tanque, causando su ruptura. Al confrontar al conductor del sedán sobre el cuidado necesario, este respondió con agresiones verbales y físicas. Un acompañante del conductor salió del vehículo y comenzó a golpear al operador de la pipa en la cabeza y el rostro con una llave Stillson, hasta que los vecinos intervinieron.
El operador lesionado fue trasladado a un hospital, donde recibió atención médica y fue dado de alta dos días después del ataque. La dirección jurídica de Interapas procedió con la denuncia legal contra los responsables de los actos de violencia y sabotaje.
Este incidente no solo afecta al trabajador agredido sino también compromete la eficiencia del servicio esencial de distribución de agua a la comunidad. Interapas ha hecho un llamado a la población para que respete y proteja a los trabajadores de las pipas, quienes desempeñan una función crítica al proveer agua a los hogares de la región, especialmente en momentos de escasez y necesidad crítica.
Este llamado se extiende a toda la comunidad para fomentar un ambiente de respeto y cooperación que asegure el bienestar de todos los involucrados y la continuidad del servicio vital que Interapas proporciona. La información se comparte con el público para crear conciencia sobre la importancia de estos servicios y la necesidad de proteger a quienes los proporcionan.