Introducción a la florifagia

Por Anthony Villalobos @mastercheftony

Por solicitud de nuestros visitantes, en esta entrega, les platicaremos nuevamente sobre el tema de flores comestibles.

Este tema ha despertado el interés de muchas personas que nos han consultado sobre información, al respecto, ya que no hay suficiente bibliografía o no es del conocimiento popular.

Por eso hemos querido prepararles esta pequeña reseña sobre las flores comestibles.

Empecemos con algo de historia:

Se sabe que muchos de los antiguos imperios que dominaron el mundo, utilizaban flores, para adornar, dar color y mejorar el sabor de sus platos.

Los egipcios, árabes e indios, usaban la caléndula para dar color y sabor a sus platos. La llamaban el azafrán de los pobres. Hoy día se sigue usando la caléndula para dar color a la mantequilla, para que pierda el blanco inmaculado y tome un color más amarillo. También la cocina oriental gustaba de la caléndula, aunque era más habitual la flor del naranjo. En China, la flor más apreciada era la azucena; y en Persia en el siglo IV A.C a capuchina.

Allá en el imperio Romano, se ingerirán claveles, malvas, rosas y violetas, y lo sabemos porque nos han llegado recetas en las que incluyen estas flores, en el libro de Apicio “De re coquinaria”, aunque no sólo las usaban para cocinar, sino también como aromatizante del vino. Además, los romanos tenían la creencia de que si se colocaban flores en la cabeza, el alcohol les haría un menor efecto.

En la Península Ibérica, también, encontramos un gran consumo de flores en la Edad Media, sobretodo la rosa, la flor del naranjo y la flor de la ginesta.

Inclusive los aborígenes nativos de nuestras tierras, nos dejaron por herencia, la ingesta de flores como la de itabo.

¿Qué tal si ahora, hablamos un poco del sabor de las flores, según su especie?

Flores de Calabacín

Sabor delicado y dulzón. Se utilizan como relleno de raviolis y croquetas en la cocina italiana; en tortitas, burritos y sopas en México; rellenas fritas, al horno y en ensaladas crudas en España.

Rosas

Con ellas se preparan dulces, tartas, ensaladas de frutas y se utilizan como ingrediente en salsas de mariscos, como adorno de ensaladas y múltiples platos, según la creatividad de l’artista del fogón.

Caléndulas

Sabor algo amargo. Se emplean junto con las hojas para aromatizar bebidas. En Rusia, tomadas con una infusión, sirven para calmar las inflamaciones.

Capuchinas

Planta de sabor picante. Además de las flores, también se aprovechan las hojas y los botones. Se consumen en ensaladas, donde combinan bien con el perejil y el cilantro.

Violetas

En la antigua Grecia era símbolo de fertilidad. Se emplea como infusión digestiva, pero en la cocina se aprovecha como elemento decorativo e ingrediente de suave sabor en postres, ensaladas y como relleno para tortillas. Se pueden comer frescas, secas y confitadas. Las hojas, crudas o cocidas, pueden usarse para espesar sopas.

Geranios

Aportan diferentes fragancias a tortas y pasteles: la Pelargonium graveolens (rosa), Pelargonium crispum (limón), Pelargonium odoratissimum (manzana), y Pelargonium tomentosum (menta). Se deben utilizar siempre las flores más frescas ya que pierden rápidamente su aroma.

¿En qúe platos puedo introducir el uso de flores?

Las violetas son fantásticas para los postres. Puedes confitarlas o preparar con ellas salsas para acompañar productos de repostería y tartas.

Las rosas se prestan a la perfección a la aromatización de todo tipo de ensaladas. Los pétalos de rosas y pensamientos se pueden escarchar con azúcar: una delicia solos o acompañando a cualquier otro postre.

Las capuchinas ofrecen un matiz picante a las preparaciones: su sabor es parecido al de la pimienta.

La flor de calabacín se convierte en irresistible cuando se rellena de marisco, carne o verdura. Las flores de las plantas aromáticas, como la lavanda, pueden servir para elaborar guarniciones que acompañen a las aves y la caza.

Los crisantemos son excelentes en ensalada.

Algunos consejos, para utilizar flores en mis platillos.

* Antes de integrar flores a sus comidas, debe estar completamente seguro que pertenece a una especie no tóxica. Pueden tomar como referencia las acá mencionadas.

* No utilice flores tratadas con pesticidas, químicos o contaminantes. No se aconseja comprar estos productos en floristerías, para el consumo, a menos que certifiquen por escrito, que sus productos, son libre de químicos.

* Pruebe las flores, tómeles el sabor y descubra, en que platillos podría experimentar con la inclusión de flores comestibles.

* Las flores, se pueden utilizar tanto crudas, como semipreparadas, recuerden que uno de los puntos altos de utilizar flores, es mejorar la apariencia. Una flor sancochada, no dará gran presentación a su plato, claro eso depende mucho de la receta que preparemos.

Referencias:

Les compartimos el sitio de una empresa española llamada Alba-Sodevila, la cual se dedica a la producción de flores comestibles. Su sitio aunque sencillo, es bastante interesante, ya que en el incluye información de algunas flores y recetas de ejemplo, que le serán de interés al lector, para tener ideas, en la preparación de comidas con flores. Acá el enlace: www.alba-soldevila.com

En cuanto a literatura y documentación, les recomendamos los siguientes libros:

Cocina con flores – Adolfo Pérez Agustí

Flores Aromas Nuevos En Tu Cocina – Carlos D. Cidon

Para ilustrarlos un poco mejor, les compartimos este pequeño vídeo.

No olviden visitar nuestro artículo, sobre tipos de flores comestibles.