¿Invasión zombie en tu negocio?

Publicado el 24 octubre 2010 por Igilval

Hay cosas en el trabajo que acaban con la voluntad de los empleados de dar lo mejor de sí mismos. Pierden su confianza y las ganas de buscar soluciones de manera creativa. Ocurre de repente, como si todos los empleados fueran contagiados por un virus que les convierte en zombies.

A continuación describimos 4 contagios zombies que pueden convertir tu empresa en un sitio de trabajo zombie, donde la gente creativa y las buenas ideas están de más. Si identificas alguno de los síntomas que describimos a continuación en tu empresa, trata de mantener la calma y sigue leyendo: ¡También te explicamos cómo superar los contagios zombies!

Primer contagio: demasiadas ideas y poca acción

Imagina una empresa a la que le iba muy bien hasta que llegó la crisis (no es difícil, ¿verdad?). Cuando llegaron los malos momentos, los jefes pidieron ideas a los empleados para que les ayudasen a establecer una nueva dirección estratégica para los próximos años. Unas semanas después, cada empleado había aportado 4 o 5 ideas, así que los jefes reunieron… ¡cientos y cientos de ideas!

Los jefes no supieron qué hacer con tantas ideas y no fueron capaces de evaluar adecuadamente las ideas, ni de proporcionar feedback a los empleados. Para cuando la empresa se dio cuenta de que generar ideas es mucho más fácil que gestionarlas, era demasiado tarde. Se había convertido en un lugar de trabajo zombie. El director general dijo que 'aquello fue un verdadero desastre. Al final no nos quedó más remedio que recurrir a los despidos, que es justo lo que queríamos evitar y algunos de nuestros mejores empleados decidieron marcharse, porque tenían la sensación de que sus ideas no eran tenidas en cuenta… Al final, todos salimos perdiendo. Puede que nunca recuperemos la confianza y camaradería que había antes'.

Consejo para sobrevivir: dedica más tiempo a tus empleados y asegúrate de que hay transparencia en la comunicación

Los jefes tienen que explicar claramente a sus empleados todo el proceso: cómo enviar una idea, cuánto tiempo llevará evaluarla y cuándo y cómo obtendrán feedback acerca de su idea. Hoy en día incluso se puede ir más allá y aprovechar la web 2.0 para enviar las ideas, refinarlas, entender mejor el valor que aportan a la organización y asegurarse de que los empleados pueden comunicarlas adecuadamente a los ejecutivos.

Segundo contagio: los empleados experimentan a su libre albedrío

Intentar llevar a cabo una tarea, fracasar y descubrir una nueva solución mediante el método de prueba y error es una habilidad compartida por muchos miembros del miembro animal. Pero esa habilidad se pierde cuando te conviertes en zombie. En algunas empresas es difícil aprender del pasado. En vez de alcanzar sinergias mediante el trabajo en equipo y tener en cuenta los conocimientos adquiridos para llegar más lejos, a veces se gasta mucho dinero (que se ha conseguido a base de trabajo y esfuerzo, o peor aún, que se debe a bancos o inversores) en volver a inventar la rueda, o peor todavía: se empuja a los empleados a cometer el mismo error una y otra vez, justo como si fueran zombies.

Consejo para sobrevivir: deja por escrito las lecciones aprendidas

Escribe casos en forma de historias o informes que sirvan para reflejar las lecciones aprendidas con cada experiencia. ¡Haz la autopsia a todos los proyectos a medida que vayan finalizando! Aunque no sea más que un sencillo listado (qué se llegó a hacer, qué quedó pendiente, por qué…). No sobrevalores las experiencias que tuvieron más éxito. Con mucha frecuencia, de dónde más se puede aprender es de las experiencias negativas, de las cosas que salieron mal: de ahí es de dónde se pueden generar más nuevos conocimientos si se refleja por escrito lo aprendido.

Tercer contagio: llegar demasiado lejos

En el mundo de los negocios existe el 'Valle de la Muerte'. Es algo que saben muy bien algunos emprendedores. A él llegan las innovaciones y los innovadores cuando no se les proporcionan suficientes fondos y recursos. Después de llegar al Valle, los innovadores (aquellos que lo hacen en exceso) normalmente se sienten víctimas de un mercado que, simplemente no les entiende, no les hace caso, o que busca algo más sencillo. Son muchos los casos de emprendedores que han fracasado y han dicho 'la gente no sabía qué hacer con mi producto' o 'creo que querían algo más sencillo, pero en ese momento, pensé que iba a cambiar el mundo'.

Consejo para sobrevivir: practica la espera activa

Espera activamente a que se de un cambio en las condiciones del mercado antes de introducir una idea y usa tus mejores técnicas analíticas para establecer el calendario adecuado. Esto es aplicable a la apertura de un nuevo local, al lanzamiento de un producto o a la de una determinada oferta: la elección del día y el momento adecuado hará que el lanzamiento sea mucho más exitoso. Evita que coincida con una fecha importante… o hazlo coincidir con un acontecimiento importante, en función de las circunstancias.

Cuarto contagio: tus ideas se han convertido en 'ruido de fondo' para tus colegas

Prácticamente el 100% de los empleados tienen ideas que, piensan, podrían ser novedosas para su negocio. Pero también sucede que la mayoría de los empleados son incapaces de decidir cuál de entre todas las ideas que tienen es la que realmente merece la pena. Una falta de perspectiva o de la decisión necesaria puede hacer que las ideas se queden simplemente en eso, en ideas, que hacen mucho ruido, pero que no van más allá. Al final los demás lo perciben, el empleado se ha convertido en un zombie. Y las organizaciones que muestran falta de confianza en la gente creativa tienen el peligro de terminar convertidas en un lugar de trabajo zombie.

Consejo para sobrevivir: analiza tus ideas

Para cualquier idea que tengas, calcula la cantidad de tiempo que te llevará desarrollarla y multiplícalo por 5. Probablemente esa sí sea la cantidad de tiempo que te lleve desarrollarla. Después, recuerda una de las leyes fundamentales de la economía: estás tratando de satisfacer deseos ilimitados (ideas) con recursos limitados (tiempo y dinero). Así que sé muy cuidadoso al decidir las ideas en las que te centras, para optimizar tus valiosos recursos. Los innovadores más exitosos no sólo tienen y mantienen un portfolio de ideas, sino que también identifican las diferencias que hay entre estas ideas: unas ideas están relacionadas con aspectos locales mientras que otras tienen implicaciones globales, unas están dirigidas al corto plazo y otras al largo plazo… Hacer un trabajo analítico previo de tus ideas, te hará ganar credibilidad y confianza a ti y a tus ideas ante ti y ante los demás.

Esperamos que esta guía de supervivencia te ayude a evitar que tu negocio se convierta en un lugar de trabajo zombie. En cualquier caso, si ya es demasiado tarde… nos encantaría conocer todos los detalles, incluso los más sangrantes. ¿Has sido testigo alguna vez de la transformación de un negocio en un lugar de trabajo zombie? Si fue así… ¿qué hiciste?