... que jamás pensé que pudieran existir.
No creo que pueda escribir alguna introducción que le haga justicia a lo raras que me resultan algunas de estas cosas, así que mejor lo voy a dejar aquí, porque la verdad es que en la mayoría de los casos hay que verlos para creerlos.
Un invento ideal si crees que a tu mejor amigo perruno le molesta mojarse con la lluvia tanto como a ti. Aunque estoy convencida que usar un chubasquero para animales sería bastante más práctico (¿soy la única ya siente el dolor en el brazo por intentar mantenerlo bien colocado pro más de 5 minutos?), hay que reconocer que el inventor del Dogbrella al menos se preocupa por el bienestar de su mascota en los días en los que el sol no nos acompaña.
¿Qué cómo funciona? Es un paraguas común y corriente, pero invertido, que se conecta al collar de un perro a través de una cadena.
Increíble pero cierto, una bicicleta que se impulsa con los pies... perosin pedales.
Diseñado por Tom Hambrock y Jurispetter, The Fliz es una "fantástica" bicicleta en la que, en vez de ir sentado, vas colgado de la estructura superior mediante un arnés, mientras corres para impulsarte hasta el infinito y más allá. Y ya cuando estés con la lengua afuera del cansancio, siempre puedes subir los pies y apoyarlos en los soportes de las ruedas traseras mientras la guía con el volante.
Creo que está de más decir que no veo una de estas en mi futuro... al menos no hasta que mejore mucho, pero mucho, mi equilibrio.
Medias peludas anti pervertidos
¡Buen fin de semana!