Inversiones 101: ¿cómo iniciarse en la bolsa de valores?

Por Finproyectos @FinProyectos

El tema de las inversiones es uno de los que suelen llamar más la atención en las personas. Y es lógico; porque hablar de esto es hacer alusión a obtener beneficios, incrementar las arcas, ganar dinero, etc.

Sin embargo, por distintas razones, no todos los que se ven interesados en este tema se inician en las inversiones en la bolsa de valores. Aun con el auge que tiene, no todo el mundo invierte en los mercados bursátiles.

Es por esta razón que vamos a tratar el tema de las inversiones, para quienes realmente quieran iniciarse en el mundo de la bolsa de valores. Proveyendo algunas pautas básicas que debes tomar en cuenta a la hora de invertir de manera que sea una buena experiencia.

Existen varias ideas, positivas y negativas, que rondan la cabeza de quien quiere hacer inversiones en la bolsa de valores. Estas van desde que es un mundo especializado en donde solo algunos pueden entrar, hasta que todo es una trama del "imperio" para sacar y explotar el dinero de los pobres.

Tomando esto en consideración, la pregunta natural es ¿ Vale la pena hacer inversiones en la bolsa de valores? Y la respuesta, igualmente natural, es sí.

¿Por qué?

Porque el mercado de valores ha democratizado el mundo de los grandes capitales. Permitiéndote acceder a un espacio en donde puedes obtener beneficios o ganancias de transacciones que no necesariamente tienen que ver contigo.

Es decir, pones tu dinero a trabajar, sin que seas tú que estés produciendo el beneficio. Sino que le das un voto de confianza, a tal o cual empresa, para genere esos beneficios por ti. De hecho, cuando entras en la bolsa de valores, te haces socio(a) de la empresa.

En otras palabras, a través de este mercado, logras asociarte a las empresas que dominan el mundo de los negocios de manera global; con personalidades como Bill Gates, Carlos Slim, Jeff Bezos, etc

Por lo tanto, cuando haces inversiones en estos mercados, no solamente puedes obtener beneficios, sino que, al mismo tiempo, tienes la capacidad de ser "socio(a)" de emporios empresariales mundiales, estando sentado en tu casa.

A todo esto, dos de las principales causas que comúnmente impiden a las personas a invertir en la bolsa de valores tienen que ver con que: 1) No tienen los fondos o capitales "suficientes" y 2) Tienen temor a perder su dinero.

Máxime con la cantidad de historias, ciertas o no, de personas que no han tenido éxito en estos asuntos. Y sin contar con Hollywood que no ayuda mucho tampoco.

Tomando todo esto en consideración, es importante resaltar que la bolsa de valores no es el paraíso de dinero. En el que inviertes y al otro día tienes todos los millones del mundo, y efectivamente existen personas que han perdido su dinero.

No obstante, invertir en la bolsa de valores, si se hace de manera adecuada, es decir, a través de una estrategia; vale la pena. Porque te permite generar ganancias de una manera, no tan complicada, y sin estar en frente de una empresa.

Partiendo de que sí vale la pena hacer inversiones en la bolsa de valores. La pregunta que surge es ¿Cómo iniciarse en este mundo? ¿Qué hay que hacer para ser un inversionista en la bolsa de valores?

Para esto vamos a proveerte de algunas pautas básicas que debes tomar en cuenta a la hora de iniciarte en este mundo tan interesante de los mercados bursátiles. Ten pendiente que toda inversión parte de tres elementos básicos: Rentabilidad, riesgo y tiempo.

Cada uno de estos elementos ser resume en tres preguntas:

  • La rentabilidad: ¿Qué tanto beneficio que esperas recibir?
  • El tiempo: ¿Qué tanto puedes esperar?
  • El riesgo: ¿Qué tanto puedes perder?

Por lo tanto, si vas a entrar a este mundo debes responder cada una de ellas, y asumir lo que viene de la mano con estas respuestas. Porque es posible que tu expectativa de rentabilidad sea adecuada pero el tiempo no, o bien el tiempo sea adecuado pero el riesgo no.

Lo que sí debes estar seguro(a) es que cada respuesta a estas preguntas sea satisfactoria y que coordinen entre sí. Es decir, que tanto la rentabilidad, el tiempo y el riesgo, sean los adecuados a tu perfil de inversión.

Pautas para iniciarte en las inversiones en la bolsa de valores

Vamos a listar una serie de pautas que debes tomar en cuenta para iniciarte en el mundo de las inversiones. Es imprescindible que las lleves a cabo, porque de ellas depende gran parte del éxito de todo el proceso.

No significa que tienes una garantía de riqueza, pero, sin lugar a dudas, te permiten tener un buen fundamento a la hora de hacer cualquier movimiento de dinero en este mercado.

Pauta No. 1: Define tu perfil de inversión

Lo más importante en todo este proceso es que sepas cuál es tu perfil de inversión. Definir tu perfil de inversión es algo que no puedes relegar, porque sobre esa base es que vas a hacer los diferentes movimientos de dinero.

Esto del perfil de inversión en esencia responde a las tres preguntas iniciales de los elementos básicos de toda inversión:

  • ¿Qué esperas recibir?
  • ¿Cuándo quieres lograrlo?
  • ¿Qué estás dispuesto(a) a sacrificar por ello?

En ese sentido, el perfil de inversión se logra cuando, luego de un proceso de evaluación, defines qué puedes y qué no puedes hacer como inversionista. En otras palabras, cuáles son tus límites.

Por ejemplo, existen instrumentos financieros altamente riesgosos, y si tu perfil de inversión dice que eres conservador en el tema, entonces no es prudente, aunque la rentabilidad sea atractiva, que inviertas en ellos; porque generarás mucha tensión, desasosiego, inestabilidad, etc, y, si por alguna razón, las cosas no salen como esperabas, entonces será mucho peor.

Es por esto que debes tener definido cuál es ese perfil de inversiones que tienes, y partiendo de él, es que vas a llevar a cabo todas las acciones de inversión, la creación de tu portafolio, etc.

Pauta No. 2: Crea un capital solo para esto

En la bolsa de valores lo que se invierte es dinero. Y sin capital no puedes funcionar en los mercados bursátiles.

Es por esta razón que debes apartar una porción, relativamente importante, de dinero para ponerlo a trabajar. Sabiendo que es un dinero dedicado exclusivamente para eso.

¿Qué quiere decir esto último? Que capital y ahorro no es lo mismo. El capital es para producir y el ahorro es para solventar o pagar cosas. Cada uno tiene una función específica y cuando las solapas entre sí, puede generar problemas.

Por lo tanto, si acumulas capital, aun sea por vía del ahorro, es capital, y debes usarlo solo para eso. Y si acumulas para el ahorro, fondo de contingencia, etc. debes usarlo solo para eso. No cometas el error de usar lo del ahorro para capital, ni lo del capital para el ahorro.

Recuerda que toda inversión maneja un nivel (alto, medio o bajo) de riesgo. Por lo tanto, es probable que sufras pérdidas. Lo que significa que no debes contar con ese dinero para cosas relevantes.

En otras palabras, si tienes hijos(as) en el colegio y, evidentemente, esto es importante; no debes tomar ese dinero e invertirlo, porque, aunque puedes obtener beneficios, también puedes perderlo; y si esto es relevante para ti, entonces no debes ponerlo en juego.

De manera que cuando apartes dicho capital, debes hacerlo con la intención de perderlo, o mejor aún, para no generar tanta fatalidad, que sea un dinero con el que no te sientas apegado(a); del cual puedas prescindir. Y que, si sucediese algo no esperado, te afecte lo menos posible a tu flujo regular de dinero.

Pauta No. 3: Busca ayuda

El mundo de las inversiones puede ser abrumador, ya que existen un sin número de terminologías, instrumentos, maneras, etc. que tienden a confundir.

Es por esto que es necesario que busques ayuda de profesionales que te guíen. Hacer esto solo(a) puede ser catastrófico. Si nunca has estado en estas andanzas puede que pierdas lo más por lo menos.

Es mejor que te tomes un tiempo, consultes a tu asesor(a) financiero e indagues de las alternativas en el área de las inversiones a las que puedas acceder.

No necesariamente quien te asesora en finanzas personales es la persona indicada para asistirte en el tema de las inversiones. De hecho, si ese(a) asesor(a) es serio(a), y no es experto(a) en inversiones, entonces te va a referir a un puesto o corredor de bolsa que te asista.

Por lo general los bancos tienen un acápite de inversiones, en donde tienen expertos en esto de la bolsa de valores que te pueden asistir, y si por alguna razón no accedes a ellos, entonces bien puedes entrar a la página de la bolsa de valores de tu país y ver el listado de corredores o agentes de bolsa disponibles.

Esta última opción te garantiza la certificación y regulación de ese puesto o corredor de bolsa, ya que en esto del mercado existen mansos y cimarrones que se confunden entre sí. Por lo que, en la medida de lo posible, hay que andar con manso y evitar los cimarrones.

El mundo de las inversiones está disponible para ti. Puedes acceder a él y obtener beneficios, pero debes tomar en cuenta que no es un paraíso. Toma tiempo entenderlo, adaptarse y aprender de él. Por lo que, enmarcarse en esta realidad, te hará tener una perspectiva distinta de tus inversiones.

Y debes responder a tres preguntas vinculadas a los tres elementos básicos de toda inversión:

  • La rentabilidad: ¿Qué tanto beneficio que esperas recibir?
  • El tiempo: ¿Qué tanto puedes esperar?
  • El riesgo: ¿Qué estas tanto puedes perder?

Responderlas de manera adecuada, sin tener conflicto entre ellas, es sinónimo de buen proceso de inversión el cual puedes llevar a cabo.

Al mismo tiempo existe tres pautas primordiales para que este proceso se exitoso. Debes definir tu perfil de inversión, apartar un capital exclusivo para ello, y buscar la ayuda puntual de tu asesor financiero, en primera instancia, y de un especialista en inversiones. Para que en conjunto puedan desarrollar la estrategia ideal para tus inversiones.

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