Que sensación esta tan rara la de estar y no ser visto.La de haber vivido una vida y llegado a este punto, tener que empezar de nuevo, y después de haber sorteado mil inconvenientes y haber combatido en mil batallas el ciclo de la vida vida me vuelve a colocar al inicio, al principio, como si lo recorrido no contara para nada.
Creo el bagaje esta ahí, si echo la vista atrás observo que me ha servido para hacerme a mi mismo y salir indemne de este cúmulo de experiencias que es la vida. Pero siento que cierto halo de invisibilidad me ha hecho pasar desapercibido inherente a los acontecimientos que han ido pasando por Mi Camino de Vida.
Esto no es ni malo ni bueno, es lo que recojo de mi siembra, y no me quejo, sino que reflexiono en voz alta y comparto mi pensamiento contigo.
¿Pero, para que el éxito,la fama, el reconocimiento o el prestigio?
Quizá busco lo que no tengo, quizá el su bidón de reconocimiento, fama o prestigio nuble mi entendimiento.
A lo mejor si me quedo como estoy, invisible, llego a más sitios, oigo el silencio que tanto me gusta, gozo de la sonrisa gratuita que mi hija me regala a cada instante, sin pedir nada a cambio u otras sutilezas que la vida insiste en regalarme y que yo, obcecado en mi ceguera de éxito y reconocimiento, no soy capaz de ver y me pierdo si insisto en esta estupidez.
La invisibilidad es una oportunidad para navegar entre los demás, un camino lleno de aprendizaje que no está exento de dificultades, pero el premio obtenido soy consciente merece la pena, porque las personas que han ido dejando huella en Mi Camino de Vida, es eterno es para toda la vida.
Releyendo este post me doy cuenta el grado de ego tan preocupante que tiende aflorar, en mi una y otra vez, un baño de humildad me vendría bien, tanta tontería me aburre hasta mí, sentirme el centro del mundo no es importante, ser imprescindible tampoco.
Así que toca empezar de nuevo, dejar aparcado mis miedos, mis inseguridades, toca colocarme en la senda del camino, levantar la cabeza y creer en mi, escuchar a mi gente, robarle al tiempo cada segundo para conseguir mi objetivo, todo cuenta, pero no todo vale.