Isa Romero Cortijo: “Moverse por el ámbito editorial puede convertirse en toda una hazaña para un escritor novel”

Pablito no quiere nacer resulta una lectura muy adecuada para leer a los niños antes de dormir

La escritora petrerense Isa Romero Cortijo. Fuente: petreraldia

Para empezar cuéntenos cómo surgió Pablito no quiere nacer.
Pablito no quiere nacer surgió en una época en que el tema de la maternidad estaba en el ambiente, por así decirlo, puesto que varias amigas y conocidas mías estaban embarazadas. Ellas me contaban sus vivencias, cómo se sentían como futuras madres. Y ello me llevó a preguntarme: “pero… ¿cómo se siente el bebé en la barriga de su mamá?” Me pareció que sería divertido darle la vuelta a la tortilla.

Es un libro dirigido principalmente al público infantil, ¿pero se ha sorprendido con otros perfiles de lectores?
Sí. Sorprendentemente, el libro está teniendo una acogida igual (o incluso mejor) entre el público adulto, ya que algunos de los guiños casan muy bien con un humor más maduro. Los niños y los no tan niños parecen disfrutar de una forma u otra de la novela, cada uno a su manera. Y, además, me ha encantado descubrir que Pablito no quiere nacer resulta también una lectura muy adecuada para leer a nuestros hijos antes de dormir, ya que así los padres pueden explicar a los más pequeños esas bromas de las que hablaba.

En Pablito no quiere nacer nos encontramos con un bebé que se encuentra en la barriga de su mamá y que va percibiendo, por primera vez en su vida, todo lo que le rodea. ¿Cómo se documentó para conseguir enternecer al lector? ¿Resultó complicado ponerse en el lugar del feto?
Más que documentación, podría decirse que eché mano de la imaginación. Quizá hubiera resultado difícil ponerse en el lugar de Pablito si este no tuviera una personalidad tan arrolladora. Sin embargo, desde el principio el bebé muestra su fuerte y peculiar carácter, al que hay que añadir su torpe (pero enternecedora) interpretación del mundo que le rodea, con lo que resulta casi imposible no congraciarse con él. ¡Pobre Pablo!

¿Qué fue lo primero que hizo cuando puso el punto final a la historia de Pablito?
Dejarla reposar. Como un buen guiso, creo que es conveniente dejar que cualquier escrito se asiente. No demasiado tiempo, eso sí. Y luego, por supuesto, probar de sal. En este caso, revisarla con posterioridad desde una perspectiva más panorámica, más crítica.

Por lo general, antes de mandar los ‘manuscritos’ a las editoriales se suele recurrir a un primer lector amigo. ¿Fue este su caso? De existir ese amigo, ¿recuerda cuál fue su comentario?
Debo reconocer que antes de esta primera publicación no había confesado prácticamente a nadie conocido mi dedicación a la escritura. No obstante, una vez iniciado el proceso de edición sí que di a leer mi obra a mis familiares y a una buena amiga, a quien agradezco desde aquí sus buenos consejos. Recuerdo a la perfección su primer comentario: “Me he quedado con ganas de más”. Son esas palabras las que hacen que, en efecto, quiera seguir dando más de mí misma.

Portada de la novela. Edita Editorial ECU de Alicante

¿Recuerda lo que sintió cuando tuvo entre sus manos el primer ejemplar de la novela?
Me sentí maravillada, como si el libro que tenía en mis manos no fuera real. Al fin y al cabo, se trataba de un sueño hecho realidad; me costó unos segundos asimilarlo. La portada, tan suave y con mi nombre en ella, el tacto agradable de las páginas con mis palabras impresas… ¡no me lo podía creer!

Para aquellos que no hayan leído su opera prima, ¿cree que la portada de Pablito no quiere nacer transmite la esencia de la novela?
Se trata de una portada que llama mucho la atención, sin duda. Yo diría que es una antesala, una invitación a leer la historia de Pablito. Gloria Fernández realizó unas inmejorables ilustraciones sin las cuales Pablito no quiere nacer sería otro. Cabe agradecer también su labor en esta publicación.

Su novela ha sido publicada por la Editorial ECU. ¿Qué tal su experiencia con el mundo editorial? ¿Tuvo que tocar a muchas puertas antes de obtener el sí?
Resulta muy complicado publicar por primera vez, sobre todo si uno no conoce el mundillo. Moverse por el ámbito editorial puede convertirse en toda una hazaña para un escritor novel. Hay que tocar a varias puertas sin la certeza de que haya nadie dentro. Afortunadamente, encontré al final las puertas abiertas de ECU.

Algunos editores de la provincia reclaman una mejor distribución de ECU, puesto que suele limitarse a la provincia de Alicante. ¿Sabe si su libro ha teniendo salida fuera de otras provincias?
En efecto, me gustaría que la distribución de mi obra se vaya ampliando paulatinamente. Sé, también, que Pablito no quiere nacer ha llegado a otros puntos de la geografía española (como, por ejemplo, Madrid) e incluso a Perú. Asimismo, la venta online además de la posibilidad de adquirir Pablito no quiere nacer en ebook o libro electrónico (dado que está disponible en plataformas como Google Play y iTunes) hace posible que llegue a cualquier parte del mundo.

El libro está en el mercado desde el 2013. ¿Tiene datos sobre cómo ha sido recibido por los lectores?
Aunque no conozco con exactitud el número de ventas, me han llegado gran cantidad de comentarios positivos acerca de mi historia, lo que me hace sentir muy feliz. Se experimenta una gran satisfacción cuando los demás valoran tu trabajo. Pero, sobre todo, es una inyección de ánimo que no tiene precio. Además, como comentaba anteriormente, la acogida es positiva tanto por parte del público infantil como del adulto, por lo que es un motivo doble de alegría.

Ha presentado la novela en distintas ciudades como Petrer y Alicante. También estuvo hace unos meses en la Feria del Libro de Alicante 2014. ¿Qué le han aportado estos eventos profesionalmente y en un término más personal?
Pese a que todavía me he de armar de una pizca de coraje para enfrentarme a este tipo de eventos, creo que poco a poco me están aportando una madurez que no esperaba. Lo que más destacaría, sin embargo, es la riqueza que aporta reunirse con el lector y compartir vivencias. Se aprende muchísimo de los lectores: tanto a redescubrir tu propia novela como a seguir escribiendo.

Presentación de “Pablito no quiere nacer” en Casa del Libro de Alicante

Con respecto a la Feria del Libro de Alicante reclamamos una mayor promoción del evento cultural de nuestra provincia, puesto que las últimas ediciones, en nuestra opinión, no tuvieron demasiada repercusión. Quizá el cambio de fecha y ubicación no haya beneficiado. ¿Cómo fue su experiencia y qué opina sobre este tema?
Mi experiencia, al ser la primera feria a la que acudía como autora, fue gratificante, pero es cierto que una mayor promoción ayudaría a mejorar la afluencia de público. Desconozco los cambios que se podrían obrar a este respecto, pero estoy segura de que preguntando al público encontraríamos buenas ideas. Se dice que el cliente siempre tiene la razón.

En la Feria del Libro de Alicante 2014

Cumplido el sueño de ver su obra publicada, ¿qué aspiraciones tiene como escritora?
A largo plazo, me gustaría dedicarme a tiempo completo a la escritura. Es decir, poder vivir de la literatura. Con todo, sé que hay que tener los pies en la tierra, así que lo mejor será ir “partido a partido”, como afirma Diego Simeone, de quien el padre de Pablito es fan incondicional, por cierto.

¿Seguirá la misma línea ‘infantil’ en su próxima obra o se adentrará en otros retos literarios?
No me gustaría abandonar nunca la literatura infantil, pero sí alternarla con textos dirigidos a un público adulto. De hecho, mis primeras obras escritas (que aún andan en el cajón) están dirigidas a este tipo de público y fue ahí desde donde di el salto hacia la Literatura Infantil y Juvenil (LIJ). Tampoco descarto relatos más cortos. Recientemente, por ejemplo, se ha publicado un microrrelato que escribí en la antología del “II Premio de Microrrelatos Manuel J. Peláez”.

Nos gustaría saber si tiene relación con otros escritores alicantinos, como la petrerense Verónica Martínez Amat, o de su editorial.
Sí, gracias a la Asociación de Escritores Gramática Parda he conocido a muchos escritores de la zona y amantes de la lectura, magníficas personas. Entre ellos a Verónica, que es para mí una compañera de filas a la que tengo gran estima como persona y como escritora. El paso de los españoles que descansa en uno de mis estantes está esperando impacientemente un “hermanito”.

Por último, ¿qué libro recomendaría a los seguidores de este blog, además de su novela?
Volviendo a la literatura infantil, recomendaría un clásico de todos los tiempos que, al igual que Pablito no quiere nacer, no tiene edad a pesar de ser una lectura inicialmente infantil: El Principito, de Antoine de Saint-Exupéry. Y no se me ocurre mejor razón que porque “lo esencial es invisible a los ojos”.