ISHQ. El color de las granadas - Juan Andrés Moya Montañez

Publicado el 11 septiembre 2015 por Tatty
Título: ISHQ. El color de las granadasAutor: Juan Andrés Moya MontañezEditorial: Autoeditado
Año: 2015Nº de páginas aprox.: 256
Hace un par de años tuve la oportunidad de participar en la lectura conjunta de Noche y niebla, relato a través del que descubrí a Juan Andrés Moya Montañez, quien ahora acaba de autopublicar su primera novela bajo el título de ISHQ. El color de las granadas, una obra con la que me ha vuelto a sorprender muy gratamente.

La historia que nos relata en "ISHQ. El color de las granadas" se sitúa en La India durante la época en la que el imperio mogol se encuentra bajo el gobierno de Akbar el Grande, quien reside junto a su familia en el palacio imperial ubicado en la ciudad de Lahore. Su hijo Nuruddin, heredero al trono del imperio, se muestra más interesado en los versos y la poesía que en seguir los pasos de su padre, por lo que la reina Mariam comienza a preocuparse e insistir en su deber de contraer matrimonio si quiere llegar a ser respetado por su pueblo. Pero Nuruddin cree en el amor y no está dispuesto a escoger por obligación a una mujer a la que no ame realmente, por lo que las palabras de su madre no surtirán efecto hasta que descubra entre las esclavas del palacio a la joven Anarkali, por la que se sentirá inmediatamente cautivado a pesar de las diferencias que los separan, que harán que su amor sea imposible.Muchos ya sabéis que las novelas ambientadas en La India están entre mis favoritas por lo que había muchas posibilidades de que esta novela me gustase, más teniendo en cuenta que estaba protagonizada por uno de los personajes históricos que más me fascinan, el emperador Jahangir, aunque en este caso lo conocemos en su época de juventud y por lo tanto bajo el nombre de Nuruddin. He de reconocer que acabé la lectura un tanto descolocada pues esta historia no encajaba con los conocimientos que yo tenía en torno a su figura, por lo que tuve que recurrir a una búsqueda en Internet para profundizar en lo que Juan Andrés Moya Montañez me había contado, dudas que quedaron resueltas en su propio blog, donde recoge el origen de la leyenda de Anarkali y Jahangir.ISHQ. El color de las granadas se presenta dividido en veintitrés capítulos que quedan completados con un prólogo y un epílogo. A lo largo de los mismos y de una manera lineal vamos siguiendo el curso de los acontecimientos gracias a un narrador omnisciente que nos da acceso a conocer lo que está sucediendo en torno a cada personaje. Es una de esas obras que hay que leer con calma y no por la dificultad que presente la historia que nos narra, sino para poder disfrutar de la forma en la que esta está contada, que es sin duda uno de los aspectos que más llama la atención desde un primer momento.Como ya comenté en mi reseña de Noche y niebla, Juan Andrés Moya escribe muy bien lo que hace que sea una delicia leerle. No es "ISHQ. El color de las granadas" una novela al uso en este sentido ya que la prosa que vamos a encontrar está cargada de profundidad y lirismo, empleando el autor un estilo sumamente cuidado, delicado y envolvente, con abundancia de metáforas y símiles y del que se desprende en todo momento belleza y armonía. Aunque esto pueda llevarnos a pensar que será un libro complicado de leer, no es así, la lectura resulta sencilla y comprensible, logrando el autor captar nuestra atención desde el principio y mantener, aún con un ritmo pausado, la atención y el interés por la historia que está contando, haciéndonos al mismo tiempo disfrutar de ese estilo tan personal e íntimo de narrar. Por otro lado, este tipo de narración y el tono empleado encaja, desde mi punto de vista, a la perfección con el ambiente y época en la que se desarrolla la acción, sumergiendo al lector en esa atmósfera de ensueño, romanticismo y exotismo tan característica de este país.No son muchos los personajes que vamos a encontrar en ISHQ. El color de las granadas, centrándose la trama principalmente en lo acontecido en torno a Nuruddin y Anarkali. Son dos figuras que el autor perfila con detalle para que lleguemos a conocer no solo sus caracteres, sino a comprender la intensidad de las emociones y sentimientos que están experimentando. Lejos de parecerse a su padre, el príncipe Nuruddin, heredero al trono, es un joven inocente, erudito, sensible y soñador, mostrando más interés por los textos y poesía que por los designios que el futuro le tiene reservados. Comparte algunos de estos rasgos con Anarkali, una joven hermosa, tierna y bondadosa que, a pesar de su condición de esclava, también es aficionada a la poesía, afición que queda plasmada a través de los versos del poeta Rumi.Si bien ellos son el eje central de la trama, conoceremos igualmente a la reina Mariam y al emperador Akbar, quienes a pesar de su papel secundario quedan bien definidos, permitiéndonos descubrir sus personalidades, las cuales quedan reflejadas en sus reacciones y en las decisiones que toman en relación con su hijo Nuruddin. Otra figura importante es la de Salima, responsable de la servidumbre del palacio y cuya evolución a lo largo de la trama, al igual que la de la reina, es interesante.Otra de las cuestiones que Juan Andrés Moya Montañez ha cuidado en su novela es la ambientación y así, a través de bellas y minuciosas descripciones, nos da una amplia visión del aspecto del mahal o palacio imperial, ubicado en la ciudad de Lahore, así como de los jardines que lo rodean. Como ya señalaba anteriormente, logra a través de sus palabras trasladarnos en el tiempo para que nos ubiquemos en esta época y disfrutemos del esplendor, grandiosidad, colorido y encanto que caracterizó a este imperio, mostrándonos las principales dependencias y distribución, el importante zenana o los jardines con sus fuentes así como el funcionamiento, servidumbre, obligaciones y normas de conducta.Como veis hasta ahora todo lo que os he comentado de ISHQ. El color de las granadas han sido aspectos positivos que hacen que en conjunto sea una novela muy recomendable. Además en su interior se recoge una historia de amor intensa, cargada de hermosura y sensibilidad que merece la pena descubrir, aunque yo he de reconocer que a Jahangir (Nuruddin) siempre lo asociaré con la princesa Mumtaz Mahal y por eso me he resistido a sumergirme plenamente en esta relación, marcada por las diferencias entre ambos que harán que en parte su romance nos recuerde al protagonizado por Romeo y Julieta.En definitiva, creo que es evidente que ISHQ. El color de las granadas ha sido una lectura que me ha gustado mucho y que tengo que recomendar por la bonita historia de amor que recoge en su interior y, especialmente, por la forma en la que está escrita, ya que no es habitual encontrar una obra con un estilo tan cuidado, elaborado y que resulte tan agradable de leer. 

Si te ha gustado mi reseña, puedes comprar ISHQ. El color de las granadas, a través del siguiente enlace: