Isla de los Faisanes, el condominio más pequeño del mundo

Por Nosoloviajeros @nosoloviajeros

Imagen: Oficina de turismo de Hendaya

En el País Vasco, y más concrétamente en Guipuzkoa, es sobradamente conocido el curioso estatus político de un pequeño islote del rió Bidasoa llamado “Isla de los Faisanes”; no obstante, como doy por seguro que muchos de vosotros ni seréis de por aquí cerca, ni estaréis al día, os hablaré un poco de esta curiosidad geopolítica de España.

Primero situémonos: el río Bidasoa hace de frontera natural entre España y Francia a la altura del País Vasco y parte de Navarra; y concrétamente el área que nos interesa en esta ocasión se ciñe al tramo fluvial situado en la desembocadura, entre Irún ( España ) y Hendaya ( Francia ).

No es un gran territorio que digamos, ya que apenas llega a unos 2.000 metros cuadrados y a una altitud máxima de entorno a los 6 metros. Lo curioso de este islote es que durante 6 meses al año pertenece y es administrado por España; y los otros 6 meses, por Francia. Concrétamente por los municipio que arriba os indicaba. Es el condominio más pequeño del mundo si atendemos al derecho internacional.

Desde hace siglos esta isla se ha venido utilizando como tierra neutral entre ambas naciones para realizar intercambios diplomáticos, entregas de presos, y sobre todo, para la firma y negociación de tratados internacionales. Aquí fue donde se rubricó el Tratado de Paz de los Pirineos, que puso fin al conflicto militar que enfrentó en el siglo XVII a España y Francia; y por ello en el centro de la isla existe un monolito conmemorativo de estos sucesos.

Por cierto, desde la firma de este tratado, que básicamente fue un reconocimiento por parte de España de su derrota militar, comenzó la decadencia del reino ibérico con la pérdida de múltiples territorios.

Como anécdota comentaré que la ratificación del mencionado tratado, que data de 1660, fue firmado personalmente por los reyes Felipe IV y Luis XIV. Y claro, como no podía dejar la zona tal cual ante la visita de los que entonces eran los dos hombres más importantes del planeta, había que decorar un poco el pabellón donde se realizo el “evento”. De la parte española se encargó el pintor Diego Velazquez, y de la parte francesa, la decoración corrió a cargo de un capitán del ejercito francés llamado Charles de Batz-Castelmore. ¿ Ni idea ? Era el conde de Artagnan. Si, el mismo que plasmó sobre el papel Alejandro Dumas.