Desde la playa Mansa de Punta del Este se divisa la Isla Gorriti, una reserva natural donde no está permitido nuevas construcciones, pero a donde sí están permitidas las visitas para recorrer sus senderos, pasar el día en sus playas o hacer asados en los quinchos con parrillero dispuestos para este fin. Cuando el clima lo permite, la isla recibe más de 500 visitantes cada día durante el verano.