Todos nuestros Pot Spot, son lugares pintorescos, generalmente poco conocidos o simplemente lugares anexos a otros sitios con encanto y con menos fama que estos. Un callejón, un acantilado, un banco del parque en el que tengamos un punto de vista privilegiado de esa ciudad mágica. Pero ahora que tenemos los pelillos de la nariz escarchados por el frío invernal se nos ha ocurrido calentaros la mente con un destino que podréis tener en cuenta para las próximas vacaciones. Un ‘Playa escondida’, que os parece?
Desde luego no os pilla cerca este lugar, salvo que viváis en la costa oeste mejicana. Frente a las costas de Nayarit, a menos de una hora en lancha desde Puerto Vallarta, nos encontramos es conjunto de pequeñas islas, dos grandes y dos pequeños islotes, de origen volcánico, totalmente escarpadas y abruptas, pero que encierran varios tesoros en su interior.
Para empezar, su emplazamientos las conviertes en verdaderas joyas de la naturaleza pues es habitual avistar delfines, tiburones, aves acuáticas y especialmente ballenas jorobadas (si visitáis la zona en invierno o principios de primavera). También su formación coralina rocosa esconde una gran biodiversidad marina, emplazamiento perfecto para practicar snorkel o fotografía submarina y darse de bruces con tortugas, peces de mil formas y colores así como el bello lecho marino del Pacífico.
La erosión las ha convertido en grandes formaciones rocosas, por lo que también son un entorno perfecto para practicar escalada y descenso de barrancos. Precisamente esta será una de las dos formas que os permitirán acceder a la ‘Playa escondida’ el gran aliciente de estas pequeñas islas. Se trata de una ensenada interior, prácticamente cubierta por una formación rocosa en forma de cúpula que os hará tener la sensación de encontraros en un enorme anfiteatro marino.
Decíamos que sólo se puede acceder escalando o bien, nadando, a través de una cuevas que conectan la playa exterior (a la que llegan las barcas), con la escondida. Pero tenemos una mala noticia. El asunto no es tierra libre a la que cualquiera puede acceder. En principio, no podréis ir por vuestra cuenta, puesto que las Islas Marietas son una Reserva de la Biosfera conservada por la UNESCO.
Se necesita un permiso especial. Vamos, un salvoconducto que sólo tienen las empresas de actividades turísticas de la zona. Por aquello de hacer caja (y bien que nos parece), pero la cosa no resulta del todo mala. Grupos reducidos no permiten el exceso de domingueros. Tú serás el dominguero!!
Aún así, aunque nuestros Pot Spot suelen ser para disfrutar en soledad, entendemos lógico aceptar cierta compañía si podemos recorrer un paraíso como este.
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