Desde su creación en 1948, Israel ha defendido ser la única democracia de Oriente Próximo, una región en la que proliferan los regímenes autoritarios. El Índice de democracia de la revista The Economist de 2020 sitúa a Israel en el puesto 28, calificando al país como de “democracia imperfecta”. En efecto, Israel celebra elecciones libres periódicamente, existe libertad de prensa —muy amplia comparada con la del resto de países de la región— y la población israelí goza en el papel de gran cantidad de libertades civiles.
Según la Declaración del Establecimiento del Estado de Israel del 14 de mayo de 1948, la fundación del país se basa en “el derecho del pueblo judío a reconstruir su Hogar Nacional”, asegurando “la completa igualdad de derechos políticos y sociales a todos sus habitantes, sin discriminación por religión, raza o género”. No obstante, esta declaración choca cada vez más con la voluntad de los líderes israelíes de construir un Estado etnonacional basado en la identidad judía.
El trilema de Israel: democracia, territorio o Estado-nación
La teoría del “trilema sionista”, atribuida al polítologo y exoficial del Gobierno israelí Aryeh Naor, determina que Isra...
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Nombre de usuario Contraseña Recordar cuenta Recordar contraseñaIsrael tiene que decidir: no puede ser una democracia, un Estado judío y controlar toda Palestina fue publicado en El Orden Mundial - EOM.