Quienes lucharon contra la censura de Franco creían que nunca volverían a sufrirla en democracia, pero se equivocaban: ha retornado anunciando la destrucción, en realidad la vaporización, de toda información políticamente incorrecta para el zapaterismo y sus aliados.
TVE ha retirado de su web, donde permanecía para que pudiera verse en cualquier momento y lugar, uno de sus mejores programas de “Españoles por el mundo”, el dedicado a los que viven en Israel.
El motivo es que el reportaje era demasiado normal, apacible, real. Ningún español en Israel estaba guerra alguna. Viven tranquila y amablemente.
Españoles de todo origen, judíos sefardíes o gentiles, y hasta una pareja de gays tan ostensibles que serían degollados por los palestinos de Hamas y Hezbolá en nombre de Alá.
El canal estatal ha hecho desaparecer el programa pasándolo por el horno crematorio: el antisemitismo suelen vaporizar todo lo judío, incluyendo a los mismos judíos. Crea antijudaísmo vaporizando lo positivo y multiplicando lo negativo.
“Españoles por el mundo” busca conciudadanos en cualquier parte del planeta para explicar qué hacen, cómo es su vida, en una selva entre nativos desnudos, una isla desierta o en mitad de Manhattan.
En Israel son informáticos, cocineros, guías turísticos, frailes franciscanos, gentes de toda clase y actividad, que viven en un país moderno y democrático.
El programa sólo mostraba españoles viviendo y trabajando. Pero Israel no puede ser así. Hay que mostrar enfrentamientos con palestinos, aunque los españoles no los tengan.
El gobierno Zapatero, que paga una web palestina que pide el boicot a los productos israelíes –sin sus inventos retrocederíamos décadas—, no puede dejar que se vea una sociedad con españoles felices en Israel.
No es censura, es antisemitismo. Es vaporizar simbólicamente judíos. Irán lo hará realmente, si puede. El zapaterismo pudre el socialismo con antisemitismo.
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SALAS recuerda en El Correo Gallego a los heroicos luchadores por la libertad de Murcia en contra del consejero de Cultura del PP.
Producto de la Españas que ha cultivadocon entusiasmo Zapatero: