Izquierda Unida ha decidido abordar el pacto contra la crisis que ha promovido el Gobierno con una batería concreta de medidas que se aleje del cruce de declaraciones políticas. La coalición de izquierdas ha propuesto un plan de 100 medidas, perfectamente cuantificado: su objetivo es invertir 11.800 millones de euros de dinero público para crear 1,1 millones de empleos este año.
El plan lo ha presentado hoy el coordinador de IU, Cayo Lara y el responsable del área económica del partido, José Antonio Rubio. El programa de IU se limita a un sólo enfoque político: "Una salida democrática a la crisis con un enfoque social que ayude a los trabajadores, a los autónomos y las pymes". El resto del documento presentado, al que ha accedido Público son 15 folios técnicos y cuantificados de su planteamiento.
Lo primero que ha querido explicar Lara es que su plan no contribuiría a aumentar el déficit del Estado (que debe rebajarse al 3% en 2013) ya que generaría, según sus cálculos, un retorno de "8.630 millones de euros" en impuestos y cotizaciones a la Seguridad Social.
Programa de empleo
Las medidas de empleo de Izquierda Unida contemplan, entre otras, crear un nuevo programa de empleo y formación para desempleados, dotado con 4.500 millones, que se añadiría a los 1.500 que suponen ya las ayudas de los 420 euros. El programa incluiría una jornada laboral de 5 horas y 2 de formación, por la que el parado cobraría 700 euros.
"Esto es un proyecto de Estado y no las cuatro simplezas del PP", dice Lara
Además, frente a la intención del ejecutivo de recortar la oferta de empleo público, Izquierda Unida aboga por crear 10.000 puestos más dotados con 500 millones y 45.000 puestos de trabajo en las comunidades autónomas, que se financiarían restituyendo el Impuesto de Patrimonio. Sin embargo, la coalición apuesta por limitar los salarios altos en la Administración y regular "de forma estricta" las revisiones de precios al alza en los contratos de los concursos públicos.
Para paliar la situación de la construcción, uno de los sectores que más empleo están destruyendo, IU propone una subvención para la rehabilitación de viviendas cifrada en 5.000 millones de euros, que según la coalición generarían unos ingresos para las arcas estatales de casi 10.000 millones entre retorno de IVA y cotizaciones.
Combatir la economía sumergida y modelar la fiscalidad
IU se propone combatir con energía la economía sumergida y utilizar ese dinero para financiar la creación de empleo, que cifran "entre el 20 y 25% del PIB". Para ello, entre otras cosas, incrementarían la plantilla de inspectores en Hacienda.
En cuanto a la remodelación fiscal, IU apuesta por compensar la distribución de riqueza, por la que "hoy 1.400 personas controlan actualmente un capital equivalente al 80% del PIB de España". Entre sus planteamientos está Aumento de 5 puntos en el impuesto sobre beneficios de las entidades de intermediación financiera, restituir el Impuesto sobre el Patrimonio o elevar la imposición a las Sicav (entidades con privilegios fiscales con la que tributan las grandes fortunas).También apuesta por subir la tributación del último tramo del IRPF del 43 al 50%.
Subir el salario mínimo y reducción de la jornada laboral
Entre las medidas destinadas a la remodelación del marco laboral, IU rebajaría la jornada laboral a 35 horas semanales (sin pérdida de retribución) para crear más puestos de trabajo y controlar eficazmente las horas extraordinarias.
Del mismo modo, IU apuesta por elevar el salario mínimo desde los poco más de 600 euros actuales a 1.100 euros.
La vivienda como un derecho y otras medidas
IU pretende absorber parte del stock sobrante de la crisis inmobiliaria a la vez que garantiza "el derecho a acceder a una vivienda". En este sentido apuesta por comprar a precio de coste 100.000 viviendas para crear un Parque Público de Viviendas en Alquiler moderado. "El alquiler no deberá ser superior al 30% de los ingresos de los inquilinos". Del mismo modo, pide la "suspensión de todos los procesos de ejecución del desahucio como consecuencia del impago de hipotecas en el caso de trabajadores parados".
Otras apuestas de IU son apoyar a las pymes y autónomos limitando a 30 días el pago de las Administraciones Públicas a éstas, o la creación de una Ley sobre morosidad, que obligue al pago a proveedores en un máximo de 90 días en todos los contratos privados.
Estas y otras medidas son las que pide Cayo Lara al Gobierno para "salir de la crisis por la izquierda", por eso, ha pedido al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que atienda a este "proyecto de Estado" y no a las "cuatro simplezas del PP".
(Diario Público, 26 de febrero de 2010)