IZAL: "Cuando sacamos un disco nuevo nos da la sensación de que al anterior le faltaban cosas"

Por David Gallardo @mercadeopop

IZAL. FOTO: JESÚS ROMERO


Siete años de conciertos y canciones culminaron en febrero de 2017 ante 15.000 fans en el Palacio de los Deportes de Madrid. Ese día empezó el proceso de 'autoterapia' para el grupo madrileño, que decidió retirarse una temporada para asimilar todo lo acontecido.

"Desde que nos juntamos en 2010 no habíamos parado de hacer discos y conciertos. Fueron sido siete años muy intensos y decidimos darnos un descanso", apunta a Mercadeo Pop el teclista Iván Mella, antes de que el guitarrista Alberto Pérez lance la primera broma: "Demasiado bien nos llevamos para todas las cosas que hay que decidir y el tiempo que pasamos juntos".

Con las pilas recargadas están de vuelta IZAL con su cuarto álbum de estudio, Autoterapia (Hook Ediciones, 2018), toda una toma de tierra para comprender su lugar en el mundo y con el que han querido ir un paso más allá en el sonido.

En palabras del vocalista y guitarrista Mikel Izal: "Siempre intentamos divertirnos y apasionarnos. Tampoco es que sea una búsqueda de la excelencia de ser los mejores músicos de la historia de la música. Es apasionarte con lo que haces, para no aburrirte".

Siendo esa la premisa básica del grupo, aclara Mikel que la diferencia con sus inicios es que ahora tienen "muchos más recursos, desde tiempo para grabar hasta cacharrería, habilidades y experiencia". "Suena caro el disco porque, por suerte, hemos podido invertir en él en tiempo y en medios", apostilla el batería Alejandro Jordá sobre este Autoterapia grabado en La Casa Murada de Tarragona, de nuevo con Santos & Fluren a los mandos de la producción.



ÉPICA Y SONIDO 'GORDO'

El esfuerzo hecho por el grupo se traduce en una colección de canciones robustas con un sonido 'gordo' que lleva a su conocida épica un paso más allá. "Esto es venirse arriba constantemente todo lo que puedas", bromea Jordá, antes de que apostilla Mella: "Si épico significa sonar enorme, en nuestro caso eso es buscado".

Y aún prosigue el teclista: "Es buscado porque consideramos que en un punto determinado de tal canción, esa es la mejor forma de transmitir emoción. Para mi Pausa, que es un tema lento, es súper épico y tiene tres acordes. Pero hay gente que usa el término épico como despectivo, como un quiero y no puedo. Si lo consigues es maravilloso, escuchas a Muse y te tira para atrás".

"Quizás también influyen en eso de la épica las estructuras, las melodías, la forma de cantar...", reflexiona Mikel Izal, antes de rematar: "Puede que en mi cerebro compositivo siempre estuviera eso pero no te podría explicar por qué. La única respuesta a cómo compones es a partir de lo que has escuchado toda tu vida, porque lo que haces es unir retazos de tu memoria que no sabes ni que existen".

A este respecto, continúa el vocalista apuntando que "igual en el pasado" no podían "llegar a esa altura de sonido" y, justo por eso, en Autoterapia "se realza tanto todo". "En Copacabana (2015) ya empezó a suceder, pero ahora igual es que ya vamos de la mano de toda la carga que tienen los temas para hacerlos grandes. Es verdad que puede que las canciones de IZAL te pidan elementos que antes no podíamos ni pagar y ahora va todo más sólido", explica.



ARA MALIKIAN Y LA PRESIÓN

Aparte de esa evolución sonora, hay también un esfuerzo por "buscar tiembres nuevos" con instrumentos como el banjo, el tres cubano o sintetizadores moog, a lo que incluso hay que añadir el uso del falsete por primera vez por parte del vocalista. "Son al final detallitos que van sumando, todos intentamos ir un pasito más allá", resume Mikel.

La guinda a esta obra la pone el violinista Ara Malikian, quien aporta su talento en el tema titular, algo de lo que todos se muestran más que orgullosos pero que resume el bajista Emanuel Pérez 'Gato': "Tiene la apariencia de una estrella del rock, pero nosotros nos sentíamos niños en Reyes y él es en realidad un niño, no un Rey. Además, no se conforma con la séptima toma, quiere más, a pesar de que las siete eran estupendas".

Con semejante apuesta, podría pensarse que la banda hubiera sucumbido ante la responsabilidad, pero Alberto Pérez puntualiza: "Hemos sentido más presión nuestra que externa. Se trata de quedar satisfechos nosotros y no pensar en lo que va a pasar. Nunca sabes qué va a pasar pero tú tienes que estar satisfecho. Nos presionamos bastante y somos muy exigentes con nosotros mismos".

Mella toma la palabra en este punto para recalcar que confiaban "muchísimo en las canciones". Tanto, que se veían capaces de hacer su mejor disco hasta la fecha apoyados en todos estos medios. "Yo soy un agorero, eso no lo tenía tan claro", tercia Mikel entre risas, para plantear: "Copacabana fue tan bien, con tantas canciones que nos ponían los pelos de punta, que no tenía muy claro que nos superáramos. Pero creo hemos hecho algo muy especial".

"Yo noto una evolución increíble de Copacabana a Autoterapia", amplía 'Gato', quien además confiesa que cuando acaban de grabar siempre sienten que han hecho un trabajo completo. Pero agrega: "Cuando sacamos un disco nuevo nos da la sensación de que al anterior le faltaban cosas. Agradezco que pase eso porque es garantía de que lo hemos hecho bien. Más que a la obvia evolución musical me refiero a la contundencia del sonido, que es otro mundo".

GIRA DE PRESENTACIÓN


La gira de presentación de Autoterapia arrancará en abril en México y continuará después por multitud de festivales españoles. Tras un descanso, será turno para Europa y regresar a Sudamérica, antes de emprender su propia gira de presentación ya en 2019 por pabellones de toda España. "Con toda nuestra mandanga y conciertos de dos horas y pico", anticipa Mikel.
Es 'Gato' quien toma la palabra para avanzar que llevarán un "espectáculo bastante grande que necesita un mínimo de dimensiones". Y de nuevo Mikel tercia para resumir que ahora no pueden ir a una sala de 500 personas porque llevan un espectáculo más grande y porque "el público, por fortuna, es mayor".