La democracia, como valor educativo, ha de lograr sacarnos del enfrentamiento dramático causado por nuestras diferencias en las ideas políticas, para llevarnos al enriquecimiento de los variados puntos de vista. Para lograrlo es necesario redefinir muchos conceptos políticos, entre ellos el de derecha e izquierda. Estamos acostumbrados a ver a la izquierda y a la derecha enfrentadas, dentro del gran juego de la Dualidad en el que hemos estado sumergidos durante milenios. Es necesario llevar estos dos conceptos políticos a su esencia para poder sacarlos del enfrentamiento dual, veamos cómo redefinirlos para lograrlo. Pensemos en la siguiente metáfora: para poder andar es necesario que mientras avanzamos una pierna la otra nos sostenga apoyados en el suelo, la pierna que avanzamos sería la política de izquierdas y la que nos sostiene la de derechas. Para que una sociedad progrese es imprescindible este juego de piernas, véase que esta definición esencial de izquierdas y derechas está más allá de las ideologías que circunstancialmente defiendan cada una. Con esta definición esencial la democracia puede contar con dos piernas, que lejos de enfrentarse entre sí, colaboran para hacer progresar a las sociedades, enriqueciendo además al ciudadanoen su vida individual, pues éste también necesitará de estas piernas para sus cambios y progresos personales.
Para que una democracia auténtica eche a andar es necesario redefinir en su esencia los conceptos de derecha e izquierda, ambas han de convertirse en las piernas de una sociedad que anhela poder progresar sin enfrentamientos dramáticos, sin luchas de ideas.