El lector que aún tenga la suerte de no conocer a Jack London tiene la gran oportunidad de entregarse a su literatura en este libro. Que no se espante el lector que teme a los clásicos o considera obsoleta la obra de Jack London, pues sigue perfectamente viva, tanto, que no descartamos que el lector se estremezca de placer ante el ingenio y la capacidad de anticipación de estos relatos. La vida de Jack London (1876-1916) es la historia de una obstinación en la literatura y la supervivencia. Su niñez y juventud están repleta de devaneos y aventuras: en la granja californiana donde trabajó de peón encontró la irrefrenable pasión por los libros y el aprendizaje, y a los once años, tras abandonar la granja, devoró la biblioteca pública de Oakland. La supervivencia le llevó a ser contrabandista, pescador clandestino, luego ¡se enroló en la policía marítima!, marino, carbonero, vagabundo, buscador de oro… Hubo un momento, tras visitar los congestionados centros industriales de Oriente, en que London se dio cuenta que el trabajo no libera de nada. “Desde entonces”, dice London, “he trabajado siempre para librarme del trabajo.” Así Jack London da rienda suelta a sus deseos de convertirse en un gran escritor. En 1900, con veinticuatro años de edad publica su primera novela, y lo que sigue es historia y mito: London escribe más de cincuenta libros, y se convierte en el escritor norteamericano más popular del siglo XX. Edita: Laertes
El lector que aún tenga la suerte de no conocer a Jack London tiene la gran oportunidad de entregarse a su literatura en este libro. Que no se espante el lector que teme a los clásicos o considera obsoleta la obra de Jack London, pues sigue perfectamente viva, tanto, que no descartamos que el lector se estremezca de placer ante el ingenio y la capacidad de anticipación de estos relatos. La vida de Jack London (1876-1916) es la historia de una obstinación en la literatura y la supervivencia. Su niñez y juventud están repleta de devaneos y aventuras: en la granja californiana donde trabajó de peón encontró la irrefrenable pasión por los libros y el aprendizaje, y a los once años, tras abandonar la granja, devoró la biblioteca pública de Oakland. La supervivencia le llevó a ser contrabandista, pescador clandestino, luego ¡se enroló en la policía marítima!, marino, carbonero, vagabundo, buscador de oro… Hubo un momento, tras visitar los congestionados centros industriales de Oriente, en que London se dio cuenta que el trabajo no libera de nada. “Desde entonces”, dice London, “he trabajado siempre para librarme del trabajo.” Así Jack London da rienda suelta a sus deseos de convertirse en un gran escritor. En 1900, con veinticuatro años de edad publica su primera novela, y lo que sigue es historia y mito: London escribe más de cincuenta libros, y se convierte en el escritor norteamericano más popular del siglo XX. Edita: Laertes