SinopsisDueña de un singular temperamento desde su complicada infancia de huérfana, primero a cargo de una tía poco cariñosa y después en la escuela Lowood, Jane Eyre logra el puesto de institutriz en Thornfield Hall para educar a la hija de su atrabiliario y peculiar dueño, el señor Rochester. Poco a poco, el amor irá tejiendo su red entre ellos, pero la casa y la vida de Rochester guardan un estremecedor y terrible misterio.
Una obra clásica que leí para la universidad, y que me sorprendió mucho. Confieso tener un cierto recelo hacia los clásicos (quizá por la cantidad que nos metieron a mi generación en el colegio), pero este caso me ha gustado: Jane Eyre está bien escrita, es un drama de campeonato, un romance aceptable, y una protagonista de armas tomar... aunque tiene sus momentos con los que es difícil comulgar.
HistoriaLa historia que nos cuenta Jane Eyre es un drama, podría decirse costumbrista: es la historia de buena parte de su vida, de los obstáculos y tropiezos, del dolor que tiene que soportar, las pérdidas (que no son pocas), pero también los éxitos, el amor y le bienestar. Es una montaña rusa, tiene subidas y bajadas, y creo que eso la hace más realista.En efecto, Jane Eyre sufre muchas idas y venidas, y eso incluye un distante triángulo amoroso*. ¿Quién dijo que esto era una moda reciente?También hay que admitir que tiene más de un Deus ex Machina* puesto por ahí que me ha sonado un pelín feo.Hay ocasiones en que la historia termina un arco y empieza el siguiente porque sí, porque es lo que toca, y no existe una transición natural; como ejemplo, cuando termina el arco de Jane en la escuela, simplemente un día se levanta con ansias por ampliar horizontes y ver mundo, pero nada indica que tuviera esas sensaciones antes. Es sencillamente que hay que dar el salto al siguiente argumento.También me resulta llamativo el peso que se le da a la belleza, o su ausencia, a lo largo de la novela. Se menciona constantemente, como si fuera lo más importante en el momento, y toda la historia tratara de demostrar que carece de tal interés... aunque sea nombrándola en cada capítulo.
PersonajesEl personaje principal y más perfilado es Jane: de buen corazón y un poco cabezona, es una mujer valiente y con unos principios muy estrictos*. Pero tengo que admitir que hay ciertas cosas de ella que no me han gustado, aunque no sabría especificar por qué. Quizá es el modo en que toma ciertas decisiones, con ideas fijas y sin que nadie pueda razonar con ella. Desde luego, no me gustó cómo expresaba su idea del amor*.Del resto de personajes, el más y mejor perfilado es Rochester, como un hombre de escaso atractivo, muy arrogante y condescendiente. Es altivo con todo el mundo, incluyendo la propia Jane, a la que trata de mascota y oveja en más de una ocasión. Aun así es apasionado y se nota su amor sincero por ella.Por lo demás, el resto son personajes de escasa profundidad, siendo una posible excepción St. John, al que conocemos más a fondo como un hombre frío y calculador, cuyo único sentimiento verdadero es el fervor religioso.
EstiloEl estilo es con diferencia lo que más me ha sorprendido. Esperaba algo mucho más denso, más difícil de leer, pero la lectura de Jane Eyre ha sido mucho más ligera de lo que creía. Hay un cierto exceso en las descripciones, en mi opinión, pero no hay párrafos eternos ni frases excesivamente enrevesadas.Lo he leído en inglés, no sé si eso influirá en algo, y el vocabulario es bastante asequible (y leerlo en kindle ayuda mucho, porque puedes seleccionar la palabra y ver su definición en el diccionario).Aparte de eso, solo he notado cambios de tiempo imprevistos que no venían muy a cuento, pasar a presente sin ton ni son, cuando el libro está escrito en pasado. Pero ha sido en momentos puntuales, y puede que sea una táctica recurrente de la época... eso todavía no lo sé. Aun así, descoloca un poco.
Lo mejor y lo peorLo mejor: el realismo y el drama, Lo peor: la obsesión con la belleza o su ausencia,
4/5 estrellasUn drama realista con un triángulo "amoroso"
SpoilerSelecciona el texto para leerlo, bajo tu propio riesgo. ¡Ahí van spoilers!Triángulo amoroso: Como digo, es un triángulo muy distante, pero no ha dejado de llamarme la atención. Dos hombres que quieren a la misma mujer, y además son dos hombres radicalmente opuestos. Rochester, feo, apasionado y muy enamorado, en un lado, mientras que St. John, muy atractivo, frío y desalmado, está en el otro. Aunque Jane no se debate realmente entre los dos, es evidente la comparación... tanto como el resultado. ¿Pretenden dar una lección en contra de la fría belleza, o en favor de la pasión y el amor verdadero?Deus ex Machina: Uno de los más llamativos y que, en mi opinión, quedan peor, es cuando casi al final del libro, Jane oye que la llaman, y eso le impide aceptar el matrimonio con St. John, ya que reconoce la voz de Rochester, y mágicamente se le ocurre ir a ver cómo está antes de casarse y marcharse a las Indias. Pasamos de una obra realista y dramática a introducir el efecto "milagro" al más puro estilo Deus ex Machina, ya que se sobreentiende que es Dios el que le envía el ruego de Rochester... Los principios morales de Jane: Uno de los puntos más duros en este sentido es con respecto a la esposa de Rochester. Ella ama a este hombre, y este hombre la ama a ella... pero se niega en rotundo a ser su amante, porque está casado con otra, y eso teniendo en cuenta que él le ofrece todas las seguridades de una esposa. Es muy duro enfrentarse a esta situación, sobre todo comprendiendo que Rochester no se siente casado, que tiene una lunática psicópata por mujer, y eso lo condena a vivir solo el resto de sus días.El amor de Jane: Se entiende que ella ama con completa entrega y devoción a Rochester, pero al mismo tiempo se expresa, varias veces y de manera muy rotunda, que él no la va a amar igual, que su amorío se acabará en pocos meses, luego estará resentido con ella, y finalmente llegará a apreciarla. Este proceso no parece tener que ver con que ella no se considere digna de amor, sino que es él, o los hombres en general, el que no puede amar de verdad. Es la sensación que me transmite su discurso sobre este matrimonio que casi empieza con Rochester, y me resulta un poco desagradable. ¿Por qué casarte, si esto es lo que piensas de tu esposo?