Su hermana Nellie, cuando contaba unos veinte años de edad, enloqueció y fue ingresada en un psiquiátrico, después nada más se supo. Honora fue acogida por una mujer Anne C. Toppan, de la que tomó su apellido, cambiando el nombre por el de Jane. Su nueva madrastra tenía una hija, Elizabeth. La relación con ambas no fue buena, aunque nunca recibió malos tratos. Jane se convirtió una chica problemática, de mal carácter e infeliz.
En su juventud, se dedicó a la enfermería en el Hospital Cambridge de Boston. Los pacientes a los que trató le tenían en buena consideración, en cambio entre sus compañeros de profesión la relación no era nada buena. La acusaban de mentirosa y ladrona, aunque nunca pudieron demostrar ningún robo.
En 1889 comenzó a trabajar en el Hospital General de Massachusetts pero volvió al Hospital de Cambridge, del que fue despedida poco después por excederse en la dosis de opiáceos que administraba a los pacientes.
LA CARRERA CRIMINAL
Jane Toppan
En 1890 se dedicó a la enfermería por cuenta propia, ganándose una buena reputación entre sus pacientes privados, sin embargo en 1895 mató a su casero, Israel Dunham, envenenándolo. Luego se instalaría con su mujer, Lovey Dunham, a quien dos años después acabaría matando también.En agosto de 1899 pasó las vacaciones con su hermanastra Elizabeth, a la que mató con estricnina, una sustancia que produce terribles dolores y convulsiones. Después de las vacaciones envenenaría a sus nuevos caseros aunque sobrevivieron, hasta que en 1901 fue recomendada por un médico para cuidar de Mattie Davies, una mujer enferma con la que experimentó el efecto de la morfina, llevándola dentro y fuera de la lucidez hasta sumirla en un profundo coma del que no despertó. El marido de Mattie y dos de sus hijas fueron presas también de la envenenadora.
DETENCIÓN Y CONDENA
Los sobrevivientes de la familia Davies denunciaron a Jane, por lo que se ordenó un examen toxicológico de la hija menor. El estudio dictaminó que había fallecido a causa de un envenenamiento. Jane Toppan fue detenida el 29 de octubre de 1901, acusada de asesinato.
Toppan confesó haber matado a 31 personas. Varios fueron los motivos: a uno de sus caseros, Israel Dunham lo mató porque era débil y quisquilloso; a su hermana porque la odiaba, a otros pacientes para robarles pertenencias que le interesaron y lo más sorprendente a muchos otros para experimentar con las drogas, a los que cuando se encontraban inconscientes se acostaba con ellos (hombres, mujeres y niños) ya que eso le producía una enorme satisfacción sexual, aunque nunca se probó si abusó de ellos.
Fue declarada ‘no culpable por razones de demencia’ por un tribunal del condado de Barnstable, el 23 de junio de 1902 e ingresada de por vida en la institución mental del Hospital Taunton Insane.