Japón inició el encuentro fuerte y mostró su poderío ofensivo en el primer minuto, con una buena internada por banda derecha que remató Yamaguchi a portería. Pero esta facilidad por llegar a puerta fue sólo un espejismo, puesto que el partido degeneraría en un encuentro dominado por el aspecto físico.
El equipo nipón quiso en todo momento dominar el juego mediante largas posesiones y un fútbol de toque, aunque sería Grecia la que conseguiría acercarse a portería con un peligroso disparo de Konstantinos Mitroglou en el minito 5 y otro intento de Kone en el minuto 11.
Finalmente, Japón conseguiría trasladar su dominio a una ocasión de peligro, en el minuto 20, con un disparo de Osako desde fuera del área, buscando el palo largo con un golpeo de rosca que se ha perdido cerca del poste izquierdo del guardameta Kawashima.
En el minuto 27, Keisuke Honda lo intentó de falta, desde la frontal del área, perfecta para su zurda, pero el arquero griego Karnezis atajó el cuero con una parada en dos tiempos.
En medio de un dominio esteril japonés, el partido empezó a endurecerse, con un juego muy duro por parte de los griegos, que sufrían sin balón.
En el minuto 35, Mitroglou se tuvo que retirar por un golpe en la cintura y fue sustituïdo por Gekas.
Dos minutos después, Katsouranis vio la segunda amarilla detruyó toda opción de su selección a ofrecer un fútbol más ofensivo. Katsouranis se eliminó del choque cortando un contragolpe a Hasebe de forma dura. Esto también empujó a Fernando Santos a cambiar de táctica y confiar en el veterano Karagounis para que hiciera labores de contención
Curiosamente, con un jugador menos, Grecia contó con una gran oportunidad de Torosidis, que se sacó un buen disparo desde dentro del área que despejó el portero a córner con una gran parada.
En la segunda mitad, Grecia siguió con la tónica de juego duro ante una Japón que dominó a placer la segunda parte, aunque sin conseguir avanzarse en el marcador.
Zaccheroni intentó cambiar su suerte ante portería con la entrada de Endo por Hasebe en el inicio de la segunda mitad, y la de Kagawa por Osako. Los samuráis se acercaban cada vez más a la portería de Karnezis, y estuvo muy cerca del gol en el minuto 67, con una buena jugada trenzada por la banda derecha que ha acabado en los pies de Okubo, que cerca de la línea de gol envió a las nubes.
Uchida tampoco acertó en el 71, con un disparo tras un fallo defensivo de Papastotopoulos. Okubo lo volvió a intentar 6 minutos más tarde desde lejos, con más corazón que convicción, con un fuerte disparo que paró Karnezis.