Sin duda que algunos videos, como el realizado por el periodista Tetsuo Jimbo, puso los pelos de punta al gobierno nipón por el alto riesgo que implica el ingreso a las cercanías de la planta de Fukushima. Por eso que desde hoy rige la prohibición legal de ingresar dentro del radio de 20 kilómetros dispuesto en torno a los reactores nucleares. De acuerdo a lo anunciado por el primer ministro Naoto Kan, nadie podrá ingresar a la zona de exclusión sin una autorización expresa del gobierno.
De esta forma, los residentes que han sido evacuados no podrán regresar a sus viviendas durante meses. Algunos de ellos podrán volver por sus pertenencias pero con la autorización y bajo la supervisión de las autoridades. En el radio de exclusión de Fukushima se han detectado altos niveles de radiactividad y en el interior de los reactores trabajan sólo los robots dado que el trabajo humano es altamente arriesgado.
Mientras la situación de la planta sigue siendo caótica, los trabajadores continúan luchando por contener la situación y evitar que la tragedia empeore: "Si ahora estamos en el infierno, todo lo que podemos hacer es trepar hasta el cielo", dice uno de los mails de los trabajadores de la planta que han sido dados a conocer por Wall Street Journal en lo que se ya conoce como las Cartas desde Fukushima.Una mirada no convencional al neoliberalismo y la globalización