“Esta idea surgió, luego de la creación del Palmetum del CMC, lugar que ha servido como punto de encuentro de especialistas y coleccionistas. Así como de distracción y esparcimiento para los pacientes y visitantes”, expresó Mauricio Krivoy, neurocirujano de la institución y vice-presidente de la Asociación Venezolana de Palmas (Avepalmas), Centro Unesco.
Krivoy explicó que en el Jardín Botánico se han perdido más de 25 especies. “Según estadísticas actuales, realizadas por la bióloga botánico, Yaroslavy Espinoza, se reporta la existencia de 204 especies, en su mayoría, sembradas y cultivadas por el horticultor, Augusto Braun (†) y la colaboración de personajes como el piloto Harry Gipson o del horticultor César Díaz, este último, junto con el Ing. Juan Pablo Gil, también han contribuido con la siembra y mantenimiento del Palmetum del CMC”. “Hemos comenzado con la recuperación del vivero de Augusto Braun. Estamos convencidos que si el convenio sigue funcionando como hasta ahora, en los próximos meses, le vamos aportar al Jardín Botánico, posiblemente, alrededor de 100 palmas distintas”.
Esperamos que iniciativas como esta continúen y además se vea la incorporación de los jardineros del JBUCV a estas actividades de recuperación del mismo.