TwittearNos metemos en dos jardines que se esconden en la muralla de Girona.
Al hacer el recorrido desde la plaza Jacinto Verdaguer, después de un buen un paseo, en todos los sentidos, llegamos a uno de los miradores que hay a lo largo de la muralla...
Y al asomarnos encontramos esta recogida plaza, entre cipreses...
Y restos de edificación en piedra, por los que también se puede subir...
Para ver otra perspectiva de la muralla.
Estamos en la Caserna dels Alemanys, una gran casa que, con el tiempo, se ha convertido en todo un jardín.
Incluidos los elementos que en su día tendrían otro uso, pero que ahora habitan las plantas.
Aunque tiene puerta de entrada, el cielo lo tiene al descubierto.
Y si seguimos el paseo por la muralla, encontramos otra puerta, que nos descubre otra sorpresa...
Los Jardines de la Francesa, otra casa que se convirtió en jardín...
En ambos encontraremos bancos para descansar y disfrutar de estos paisajes interiores.