Esta receta contiene gluten y huevo.Si bien es posible substituir la harina de trigo por otra sin gluten (maíz, espelta, garbanzos...), y la pasta de fideos por algunos sin gluten o bien por alguna sémola que tampoco contenga gluten.En cuanto al huevo, con no ponerlo es suficiente.No contiene lácteos.
Ingredientes para 5 litros de sopa Aceite de oliva3 ramas de apio (completas, con sus hojas y todo)4 tomates maduros no muy grandes1 cebollaEntre 150gr y 250gr de tomate triturado (esto va a depender de la intensidad de sabor que le queráis dar, yo prefiero menos)1 cucharadita de pimentón rojo1 cucharadita de cominos molidosperejil picado2 cucharadas soperas de sal2 cucharadas soperas de harina1 bote de garbanzos cocidos (si queréis que se vean poco que sea de los pequeños, pero podéis ponerlo de los grandes para que aparezcan más)100gr de fideso finos 0 ("cabello de ángel")1 huevo grande o 2 pequeños5 litros de agua.
Principales utensilios para su elaboración:1 olla grande (yo la preparo en olla de 6 litros para que me dé más margen y no se me derrame)1 cuchara para remover (preferiblemente de madera)1 batidora de manoTabla y cuchillo para cortarBol y tenedor para batir el huevo
Paso a Paso:Trocear la cebolla, el apio (quitarle algunos hilillos del tronco para que luego no se queden en el caldo) y los tomates.Cubrir el fondo de la olla con aceite de oliva y calentar.Añadir la cebolla y el apio y rehogar. Cuando empiecen a pochar, añadir los tomates.Añadir el perejil picado, el pimentón rojo y los cominos.Añadir un vaso lleno de agua para ayudar en la cocción. Dejar cocer 15 minutos.Apartar la olla del fuego y triturar todo bien con la batidora.Llenar con los 5 litros de agua.
Añadir los garbanzos y dejar cocer otros 20 minutos (aunque ya estén cocidos, suelen ser duros, y es mejor darles otro poco más de cocción para que queden más blanditos). Si preferís comprar los garbanzos cocidos a granel, no os hará falta porque estos ya están casi "deshechos" por la cocción.
Añadir los fideos y dejar cocer durante 15 minutos.
Apagar el fuego. Batir el huevo y añadirlo poco a poco mientras no dejamos de remover con la cuchara.
Dejar reposar un rato y lista para comer!
Nota: se puede congelar.
¿Qué os parece esta sopa? La verdad es que es muy recomendable en invierno y, un aviso: si os tomáis una taza por la noche os auguro un sueño profundo!
Estaré encantada de recibir vuestro comentarios, sugerencias, dudas, etc.
Un abrazo.