A veces es difícil de explicar como gente joven deja de estar entre nosotros, en muchos casos por verdaderas estupideces, y en el caso de Jeff Buckley que se dio un baño dónde no debía, nos dejó muy huérfanos de un talento descomunal. Su portentosa voz, su gran dote de composición, su gran estilo al interpretar, esa manera en que tocaba la guitarra eléctrica como si fuera una acústica... una pérdida irreparable. De él tenemos directos editados, como este Live in Chicago de 1995, de la gira de su único disco en vida "Grace" de 1994, una pasada.
Os dejo con la interpretación del tema Lover, you should've come over, sencillamente brutal.