Joder. Sabes cuando has tenido un finde pleno después de una semana plena. O sea que, por lo que sea, todo ha ido razonablemente guay. El curro en su sitio, el desparrame interesante. Sin grandes alardes pero con intensidad.
Y en esas que uno se va a recoger porque ya y le mandan el pantallazo más inesperado del planeta. ¿Pero cómo que John Frusciante vuelve a Red Hot Chili Peppers? Pero qué jodida cosa más bonita. Pues así.
Este tío es, indudablemente, lo que le falta a los Peppers. Autor compartido de sus dos obras maestras, le pude ver en vivo un par de veces y fue mágico. En un punto en el que el grupo está clamaramente anclado, esto es ilusionante. A mí me ilusiona. A mí me apetece y me place.
Qué flipe de cierre de finde, o qué. Diez años después de irse, de regreso está Frusciante. Y para que rime lo diré: Me resulta excitante.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida de Red Hot Chili Peppers (@chilipeppers) el 15 Dic, 2019 a las 12:28 PST