Y la fórmula que utilizó para realizar este LP, consistió en prescindir de la batería y del potente sonido de la guitarra eléctrica (aunque en contadas ocasiones, suena una Telecaster a muy bajo volumen). Sin duda, algo muy poco común hasta la fecha en la mayoría de las bandas, dado el intenso momento musical que se vivía. John Mayall encumbró todavía más el año 1969, considerado por los críticos musicales como uno de los años más prolíficos del rock.
En 1969, Mayall ya poseía una trayectoria fructífera y cargada de varios álbumes esenciales del blues y rythm & blues británico. Durante esta década, decide cambiar su orientación musical, a raíz de sus constantes giras y vivencias personales en los Estados Unidos.
Centrándonos en el álbum, producido y diseñado por Mayall (por aquel entonces, Mayall era un fichaje reciente del sello Polydor), fue publicado en 1969. En apenas cuatro semanas de ensayos, se grabó en directo el 12 de julio de 1969 en el teatro “Bill Graham´s Fillmore East” de Nueva York. Y por supuesto, contó la ayuda del prestigioso ingeniero de sonido Eddie Kramer.
El LP incluye siete pistas realmente extraordinarias, una buena parte compuestas por Mayall, exceptuando solamente dos que fueron coescritas junto al bajista Steve Thompson. En todas y cada una de ellas, relatan de algún modo sus vivencias personales, observando a los jóvenes de la época como caen en la amargura de las drogas, pasando por romances y otras historias llenas de realidad.
“So Hard To Share” es una pieza con un ritmo brillante, que se convierte en una de las joyas del elepé y con un soberbio Jon Mark a la guitarra. Como dato anecdótico, destacaremos que durante la grabación de los conciertos, Mark estuvo acompañado por Marianne Faithfull, la cantante y actriz que anteriormente fuera pareja sentimental del vocalista de los Rolling Stones Mick Jagger.
Y para concluir este clásico, tres temas espléndidos, iniciando con el transcendental “California” de casi diez minutos de pura improvisación. Seguidamente aparece “Thoughts About Roxanne”, un blues triste dedicado a un antiguo y especial amor de John Mayall en Los Angeles.
En 2001, el disco se reedita en formato CD, remasterizado con un sonido espectacular y le añaden tres bonus-tracks.
“The Turning Point”, se situó como todo un éxito de ventas y fue el primer disco de oro en la carrera de este venerado artista. John Mayall es un músico tremendamente admirado por todos sus colegas a los dos lados del Atlántico. Un tipo sencillo, de ideas sencillas, amante de la experimentación y la libertad musical, que fue capaz de dejarnos uno de los discos en directo más emblemáticos e innovadores de su tiempo.