El proyecto quedó aparcado hasta que apareció Johnny Jenkins, que ficha por el sello Capricorn Records. Algunos años antes, en 1962, Jenkins grabaría junto a un jovencísimo Otis Redding en la banda “The Pinetoppers”, dónde ya demostraba su valía a la guitarra y su peculiar voz. Pero Johnny nunca cosechó tanto éxito como su mítico compañero, con el que quedó profundamente enemistado.
Diversas fuentes también argumentan que el mismísimo Jimi Hendrix quedó prendado de su buen hacer a la guitarra y de su moderno estilo, sirviéndole de gran influencia antes de empezar con su estelar pero corta carrera.
Este fantástico LP, aunque un tanto oscuro y misterioso, nos resulta difícil clasificarlo, pudiéndonos encontrar desde el blues más pantanoso, hasta el rythm & blues más atrevido e incluso suena con una variante funk única. Originalmente, el disco contiene nueve temas, incorporando dos más en la esperadísima reedición de 2007, editándose por primera vez en formato CD y hasta la fecha casi imposible de conseguir esta joya de valor incalculable.
Comienzan con “I Walk On Guilded Splinters”, quizás la canción más recordada del álbum y la única grabada en directo por casi todos los integrantes, incluido Duane Allman. Nos obsequiaron con un maravilloso trabajo al dobro, acompañado de una gran intensidad a los timbales, cortesía de Jaimoe y Trucks.
La poderosa voz de Johnny Jenkins hace acto de presencia en “Sick And Tired”, y en el “Down Along The Cove” de Dylan, otra vez con Duane a la slide y su emblemático sonido. Otras pistas memorables que completan el elepé son: “Bad News”, el genial “Voodoo In You”, la movida “I Don´t Want No Woman”, en dónde la banda nos da muestras de su virtuosismo incontestable. Y para finalizar, un melancólico blues de Otis Rush llamado “My Love Will Never Die”.
La palabra “tonton macoute”, procede de la isla caribeña de Haití, cuyo significado es “hombre del saco” y está vinculada a la revolución haitiana de los cincuenta, a un cuento popular, y tiene mucho que ver con el vudú….