Para seguir con este buen camino poético, nuestro autor Jorge Rico da el paso a la publicación con su poemario Verso inconcluso, un poemario que seguro va a sorprender a los lectores, poemas que les generarán emociones positivas o negativas y con los que Jorge busca entrar en un “diálogo” con el escritor. Os dejamos con la entrevista completa a nuestro autor donde nos desvela algunos detalles de su nuevo poemario.
viveLibro (V) ¿Por qué decides dar ahora el paso hacia la publicación?
Jorge Rico (JR): Llevaba años con la idea de publicar, sin embargo, las trabas iniciales con las que me encontré con algunas editoriales y la inversión inicial me echaba para atrás. Además, siempre te da cierto “reparo” publicar poemas que, muchos de ellos, tienen bastante contenido íntimo y ahora que salen a la luz es como si te quedaras un poco desnudo. En cualquier caso, como he dicho, quise dar un paso en frente, supongo que para compartir.
En uno de sus libros La tarea del héroe, Fernando Savater hizo una referencia sobre la “soledad solidaria del poeta” en la que el poeta busca la soledad para discernir y construir aquello que, desde lo cotidiano se nos pasa, para así volver de nuevo con ello lo que ha conseguido “fabricar” en dicha soledad y compartirlo con los suyos. Supongo que ese deseo de “compartir” ha sido lo que me ha motivado a la publicación.
V: ¿Cómo se disfruta más la poesía, leída o escuchada?
JR: Puede parecer una respuesta obvia, pero depende. En un principio, me saldría decir que leer un poema te permite controlar “el tempo”, detenerte en un verso, palabra que te llame la atención… yo reconozco que suelo disfrutarlo más así, por ello. De todas formas, cuando vas a recitales y escuchas a muchas personas, aprendes muchas cosas. Lo que transmiten muchos poetas y poetisas al recitar es increíble, sin necesidad de meterle mucha pompa. Eso enriquece muchos poemas, sin duda.
V: ¿Crees que tu formación psicológica ha influido en tu poesía de alguna manera?
JR: Mi formación psicológica me ha influido en mi forma de ver la vida, en general. ¿Mi poesía? Por supuesto. A veces, leo cosas que he escrito con 16, 17, 18… y la verdad… choca. No sólo en el léxico, sino que en la explicitación de la propia conciencia, de las emociones… no quiero decir que la psicología me haya hecho más “frío” pero la capacidad de tomar en ciertos momentos cierta distancia de los procesos psicológicos… creo que me ha ayudado a ganar perspectiva.
V: ¿Por qué decidiste llamar tu poemario Verso inconcluso?
JR: Bueno, el término como tal cuando tiene años ya. Cuando estábamos en el colegio, con 16 años más o menos, un compañero y yo decidimos hacer un grupo de rap que intercalara rap en castellano y en francés. Estuvimos hablando de qué nombre le podríamos poner y de allí se nos ocurrió Verso Inconcluso. La verdad es que fue un proyecto muy chulo, solíamos quedar los fines de semana para escribir temas, nos descargábamos bases de rap y nos grabábamos a partir del móvil. Lo recuerdo ahora y suena muy cutre, pero fue genial. Luego, como tantas cosas, nuestros intereses fueron evolucionando cada uno por su lado y aunque al tiempo seguí escribiendo canciones, lo cierto es que me acabó aburriendo lo de escribir rap. Siempre me ha llenado más escribir poesía de otra manera.
Y bueno, unos años después, en el poemario anterior a este que he publicado, decidí escribir un soneto que rememoraba dicho nombre “verso inconcluso”, pretendiendo transmitir lo que supone un poco la vida del poeta, del artista en general. Que te pasas la vida creando, que haces una obra y ya estás pensando en la siguiente, y esa siguiente da pie a la siguiente… y que no se queda todo dicho, también. Veo poemas que, con el tiempo, podría re-escribir de mil formas distintas, diciendo lo mismo pero no exactamente lo mismo y que da pie a nuevos caminos… no sé, es difícil de explicar. Que ahora dicho título lo haya transferido a este poema, pues bueno. No es que lo haya hecho al azar pero digamos que no fue algo minuciosamente planeado.
De hecho, seguí una especie de “costumbre” que estoy teniendo de apoyarme en un verso o perífrasis de poemas escritos en poemarios anteriores. Pero más allá de todo eso, digamos que, una vez hecha la recopilación me apoyé en dicho título no sólo para hacer un guiño a una parte de mi pasado, sino también para transmitir la idea de que una vez terminado un poema, no queda todo dicho, no queda como tal terminado, sino que da pie a nuevas realidades.
V: ¿Qué clase de poemas podrán encontrar los lectores en Verso inconcluso?
JR: Me gustaría pensar que encontrarán una temática variada… antes de publicar el libro, tuve que leerlo y releerlo muchísimas veces e imaginarme también que era una tercera persona que leía un libro ajeno. Desde esta perspectiva, creo que se tocan muchos palos. Hay poemas que tocan temática de la “actualidad” (el conflicto de Siria, la situación política y social de España, el conflicto palestino-israelí…), guiños a textos e ideas de ciertos escritores, poemas de amor-desamor, la naturaleza…
Pero reconozco que lo que más suelo encontrar son muchas alusiones de mi infancia-adolescencia. No sé, supongo que coincidiría con una época vital en la que te das cuenta de que ya no eres un chaval, o que el recuerdo de las etapas pasadas de tu vida son lo que en gran medida te dan pie a ver lo qué eres tú ahora, el camino que has realizado hasta este punto y el aliento para el que te queda por realizar. Con los años me estoy dando cuenta que el contenido filosófico (si es que alguna vez no lo tuvo) está ganando mucho peso en mi temática poética, cosa que me gusta.
V: ¿Qué les dirías a los lectores para animarles a leer Verso inconcluso?
JR: Pues, aunque esta pregunta esperaba que se me realizara, me sigue pareciendo difícil. Diría que si sueles leer poesía, obviamente animaría a darle la oportunidad de que el libro te sorprenda de algún modo. Pocos son los libros que, al leer, no te hayan aportado nada positivo en tu vida y espero de corazón de Verso inconcluso no sea la excepción. Claro, luego depende; si eres de los que piensa que los poemas de métrica y rima son cosas del Pleistoceno, o que hay que ser súper innovador y original en la forma, igual te defrauda un poco o viceversa, pero merece la pena darle la oportunidad. Si no sueles leer poesía, igual es la perfecta oportunidad para hacerlo.
Lo bueno que veo es que creo que hay mucha variedad, que hay poemas que pueden ser, a priori, bastante sencillitos o simples (y no por ello más superficiales o peores) y a lo mejor otros un poco más enrevesados. Por lo general, puede que haya poemas que te emocionen más o te aburran, con los que estés de acuerdo o no, que te moleste más leerlos o no… pero todo ello son oportunidades para entrar en un “diálogo” con el escritor y de todo diálogo constructivo, por ficticio que sea, siempre puede ser bienvenido en la vida de uno. Déjate sorprender por la poesía.