"Como tú me empapaste en Cádiz, nada me empapa ya". Toma ya.
"El mar se ha tragado Cádiz, ha inundado el hospital". Tsunami ya.
"Lloviendo soles en Cádiz y ortiguillas en el mar".
"Las mareas son el viento y la tormenta, Carnaval". Qué bonito, hijo.
Por no hablar de los "duendes verdes que no saben bucear", filigrana surrealista, al tres por cuatro de las "chirigotas bajo el mar", el entrañable "Vaporsito" y los aires nuevos en la ciudad de "estrechos y mil días largos".
El excelente disco de Josele Santiago no concede tregua desde los mismos inicios: "Puede que no sea volar / no tener apego al suelo / alto sólo es un lugar vulgar para el cielo".