Hoy compartimos una de las historias más emotivas que han pasado por El Rincón de Mis Alhajas… la historia de un ángel.
A finales de marzo Mayka visitó nuestra web para realizar unas compras. Unos regalos para una amigas. Fue muy amable porque cuando recibió su pedido contactó conmigo para decirme que le habían gustado mucho y que estaba muy contenta con el servicio. Es algo muy significativo para una tienda online porque en la mayoría de los casos, el único contacto que tenemos con nuestros clientes es simplemente el correo automático de “pedido recibido” y “pedido enviado”.
Pero Mayka fue mucho más allá. Parecía que la barrera física de internet no existía y que estábamos compartiendo un café mientras me contaba lo que le había sucedido.
“… He recibido el pedido hace un rato. Todo genial. Muchas gracias por todo. Los llamadores son preciosos.
Los pedí para un regalo y mira por donde a mí me han regalado un regalo vuestro. Un llamador y unos pendientes de mariposas. La persona que lo compró falleció hace tres semanas, no le dio tiempo a dármelo. Ayer su familia me lo envió.
Lo compró para mi cumpleaños… La distancia hacía que no nos pudiéramos ver tanto como deseábamos. Él me dijo: nada me impedirá estar contigo en tu cumpleaños. Se atrevió a retar al destino. Su familia sabía que nuestra relación era increíble y lo primero que me enviaron junto a sus pertenencias fueron mis regalos de cumpleaños que con tanta ilusión había pedido. Por que él no podía protegerme lo quería hacer a través del llamador. Ahora sin quererlo él es mi ángel del cielo. Y siempre estará conmigo junto a ésta bolita tan valiosa sentimentalmente para mí. Le dio un infarto en el trabajo por la tarde. Esa misma mañana me explicaba por teléfono que envolvía los regalos. Qué cosas… Sin conocerte todavía… Y ahora te has convertido en especial.”
Su historia me llegó al corazón. Hasta ahora me han enviado relatos sobre las intenciones de las joyas que compran en nuestra web, pero nunca antes un testimonio me había calado tanto. Con todo el cariño y el respecto le pedí permiso a Mayka para compartir con vosotros su historia y muy amablemente aceptó.