Los vikingos fueron uno de los pueblos más aterradores de la historia, crueles invasores del Norte que a partir del siglo VII comenzaron su estrategia de expansión por Europa sembrando el pánico en el resto de culturas. Tanto es así que, como hablábamos hace unos días, que los turcos crearon un amuleto para protegerse de estos bárbaros sanguinarios: el ojo turco (en representación a los ojos azules de los nórdicos invasores)
Pero los vikingos, además de ser arduos militares, también fueron buenos agrícolas, comerciantes e incluso artistas. Esta última habilidad podemos verla en las piezas de joyería vikinga que han sido descubiertas recientemente en una granja de Selandia, enclavada en la isla más grande Dinamarca, y que según cuenta la historia, fue uno de los reinos vikingos originarios, junto con Jutlandia.
La leyenda nos cuenta que en esta zona, ahora conocida como Vestervan, estuvo emplazado el reino Lejre, donde la primera dinastía danesa ubicó su sede real.
Los tréboles y las formas geométricas son los principales motivos que decoran las joyas vikingas encontradas, fabricadas con aleación de cobre y algunas de ellas, de oro.
Broche dorado con contenido de oro y multitud de incisiones que mide aproximadamente 5cm. Está datado entre 850 y 950.
Broche Vikingo – Joyas Vikingas encontradas en Dinamarca.
Aunque la joya vikinga encontrada en Dinamarca que más ha impactado a los investigadores es una cabeza de animal de 7,3cm que parece ser iría enganchada a modo de colgante con una cadena, cuerda o similar al cuello.
Colgante Vikingo – Joyas Vikingas encontradas en Dinamarca.
Según creen, pudo ser una joya de la élite vikinga utilizada para prácticas de chamanes, mediadores entre el mundo real y el “otro mundo”.
¿Os imagináis las historias que podrían contar estas joyas? ¿Os gusta el arte y la cultura de los vikingos?
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