Lo primero que vamos a hacer es pintar el dinosaurio, yo he elegido pintura en spray porque con el buen tiempo que hace se seca enseguida y llega a todos lados. Recuerda dejar al menos 20 cm para que no se acumule la pintura y salgan gotas antiestéticas. (2)Ahora llega la parte difícil, y no digo difícil porque lo sea, sino porque yo soy demasiado torpe para esto. Mide a tu gusto por donde quieres que el dinosaurio esté dividido. Para ello debes tener en cuenta dos cosas: la primera es que tienes dejar bastante soporte, es decir, el tronco y las patas de abajo, ya que necesitas que tenga una base fuerte. Y la segunda es que debes cortarlo lo más recto posible para que tu plato esté, valga la redundancia, recto. (3)Y ya solo debemos cortarlo, con lo que tú prefieras, yo empecé con un cúter profesional y acabé con un cuchillo jamonero, no te digo más. Luego lo vamos a lijar un poco si ves que te ha quedado desigual, porque recuerda que tu plato es llano o un poco arqueado, pintamos la parte de dentro si queremos, y lo pegamos al plato. (4)
Y esto es todo mis nanazares. Estoy muy contenta porque día a día vamos creciendo. Si eres nuevo te invito a darle a me gusta a la página de Facebook para no perderte nada, porque esto no para, y para mí es un logro vital que este pequeño espacio funcione, os ayude y os guste como me venís diciendo por los comentarios. Así que nada más, nos vemos este lunes y todos los lunes siguientes.