Los ingresos suben a 4.400 millones cuando el año pasado fueron de 3.600 millones. Los netos bajan a 23.800 desde los 26.600 del año pasado.
Las provisiones bajan de 8.100 millones del año pasado a 3.220 millones.
Parte de las ganancias vienen por las menores pérdidas en los préstamos minoristas y tarjetas de crédito.