En Cuba comienza a expandirse una epidemia que convierte a los habitantes de la isla en muertos vivientes. Un grupo de supervivientes, encabezados por Juan, sacarán provecho de la situación haciéndose expertos aniquiladores de los zombies o, como ellos los llaman, de los disidentes.
Juan de los Muertos es algo así como el Torrente cubano. Para nada se trata de un film sobre una epidemia de zombies o una vuelta de tuerca al género de terror que tan popular se está haciéndo estos días. La película se centra mucho más en los diálogos de los personajes que representan una ácida crítica a la situación del país y a la sociedad cubana.
Efectos, actores, realización, etc. son de muy bajo nivel y el argumento no ayuda en absoluto, ya que es más pobre incluso que el de Torrente. En fin, una gamberrada, con una pizca de crítica picante y nada más. A mí me defraudó muchísimo. (2´5/10)