Juan el Apóstol fue el Apóstol mariquita de Jesús. Le llamaban El hijo del trueno porque estaba muy tronado.
Antes de eso era pescador, pero lo dejó todo para seguirle. En realidad a los que seguía era a Pedro y Andrés, sus compañeros de pesca.
Más tarde vio que aquel barbudo pescaba casi sin esfuerzo y caminaba sobre las aguas. Lo que terminó de convencerlo fue lo de convertir agua en vino. Lo de resucitar telemáticamente a la hija de Jairo no se lo creyó mucho.
Fue el único que se quedó a ver a Jesús colgando de la cruz. Pero no por ser valiente, si no porque le gustaban los hombres en calzoncillos. Eso sí, antes de morir, le encasquetó el cuidado de la Virgen María.
Entonces fue vagando por el mundo fundando iglesias sin que nadie se lo hubiera pedido. Luego escribió varios best sellers llamados Apocalipsis y El evangelio según Yo.
Murió de viejo, una forma muy rara de morir un apóstol, creanos.