Te tienen que gustar las verduras (claro) y haber hecho las judías verdes de muchas formas y encontrarte con esta exquisitez y decir: "esta la hago o sí o sí"
Se unen la verdura y el fruto seco. Dos de los alimentos imprescindibles para nuestro organismo; además del ajo y el zumo de limón que no son menos importantes.
Qué queréis que os diga, todo lo anterior aparte, que me gustó muchísimo. Ideal para dietas, para variar, para disfrutar, sólo o como guarnición...
Muy recomendable. Da gusto darse una vuelta (como antes) por la red y encontrarse con estos platos.
Gracias a Divina cocina.
Ingredientes:
- 500 gr de judias verdes planas (son las que usé)
- Almendras enteras crudas
- 2 ó 3 dientes de ajo
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- Zumo de limón
- 1 cucharada de pan rallado grueso
- Perejil
- Sal y pimienta
Elaboración:
Limpiamos las judias y les quitamos los bordes con un cuchillo o un pelapatatas. Si son anchas, las partimos por la mitad. Las hervimos en una olla con el agua justa y un poco de sal. Cuando estén a nuestro gusto las colamos y las reservamos.
En la sartén donde vayamos a cocinar ponemos un poco de aceite de oliva y freímos las almendras. Apartamos y le ponemos sal y las trituramos en el mortero.
En esa misma sartén añadiéndole más aceite empezamos a freír los ajos prensados, machacados o picados a mano (como queráis la intensidad del sabor).
Añadimos el pan rallado, removemos y seguimos con el perejil picado, el zumo de limón, sal, pimienta y la almendra que habíamos preparado.
Rehogamos por última vez, probamos para ajustar el sabor y lo volcamos sobre las judías.