POR QUE FUNCIONA "A ellos les gusta que las mujeres se vuelvan agresivas en la cama",dice Resnick, autora de The Pleasure Zone (La zona del placer)"Eso es sinónimo de deseo, de lujuria, y la prueba de que él te excita". Así que, de vez en cuando, deja salir tu instinto animal y despierta en tu chico todas las pasiones más primitivas.
MOVIDAS ALUCINANTES Ponerle un poquito de músculo a tu movida sexual es una cuestión tanto de actitud como de técnica. Así que desde el inicio, él tiene que saber que hoy eres tú la que mandas. Comienza la acción con un beso bien apasionado, que deje claro que quieres hacerlo tuyo !ya¡ Presiona tus labios contra los de él y agarra con fuerza su pelo mientras tu lengua recorre su boca. "El cuero cabelludo está repleto de terminaciones nerviosas y al halarle un poco el pelo se liberan las endorfinas del placer", explica Resnick. "En vez de dolor, él sentirá una sensación muy excitante". Luego, dale un fuerte masaje, frotando, presionando y recorriendo con tus uñas cada centímetro de su cuerpo...y no temas usar un poco de fuerza. "La piel de los hombres es mças gruesa que de las mujeres, así que ellos pueden-y quieren-soportar más presión", dice la experta Laura Corn, autora de The Great American Sex Diet (La gran dieta americana del sexo).
Esa técnica de caricia ruda también es válida para su "instrumento" (aunque sus testículos requieren una atención más delicada). "Casi todas las mujeres creen que los genitales masculinos son tan delicados como los femeninos", aclara Resnick. "Pero muchos hombres prefieren un agarre más firme si los están si los estás estimulando manualmente". Sabiendo esto, la próxima vez que te dirijas rumbo sur para ofrecerle un ardiente trabajo manual, pídele a tu chico que te diga hasta dónde puedes llegar.
Cuando ya él esté en frenesí, sujeta sus muñecas con una bufanda, súbete sobre él y haz las cosas a tu manera. Otra movida ruda: dile a tu chico que quieres hacerlo al estilo "perrito". Pero no dejes que él haga todo el trabajo. Mueve tu pelvis de adelante hacia atras en sincronía con su empuje, de forma que los dos cuerpos choquen al hacer contacto.
Puedes ser enérgica hasta en la sumisa posición de misionero. Jordan de 32 años, dice :"Yo pensaba que esa posición era burrida", confiesa. "Entonces conocí a Sasha, y me hizo cambiar de idea. Yo estaba sobre ella y, de pronto. me agarró el trasero, apretándolo y empujándome hacia ella. Era como si quisiera que mi cuerpo entero la penetrara ¡y luego empezó a darme manotazos por detrás! Me dolió un poco , pero también fue muy excitante.